El reconocido coreógrafo impartirá un curso de Street Dance, para jóvenes a partir de los 14 años, organizado por el Área de Juventud, Deportes y Seguridad Vial que dirige la consejera Migdalia Machín.
El curso que se iniciará a partir del 3 de septiembre, se desarrollará todos los sábados de 10:00 a 12:00 horas, durante tres meses, hasta el mes de noviembre, con una cuota de inscripción mensual de 10 euros.
Se impartirá en el salón de actos de la Ciudad Deportiva de Lanzarote o en el Centro Socio Cultural de Arrieta, según demanda e inscripciones. Las plazas serán limitadas por lo que se recomienda una pronta inscripción en la Oficina iJoven (junto a la Ciudad Deportiva de Arrecife) o en el teléfono 928 81 01 00 (extensión 3501).
Para más información, los interesados pueden contactar con el Servicio Insular de Juventud en el teléfono del Cabildo de Lanzarote indicado, marcando también las extensiones 2198, 2195 ó 2197.
Street Dance
Desde tiempos remotos el cuerpo, la danza y el movimiento fueron medios que el hombre utilizó para expresar sus sentimientos y emociones.
En los años 70 en el sur de Bronx, Nueva York, los jóvenes de la comunidad latina y afroamericana con una larga historia de pobreza y marginación, guiados por la necesidad de bailar y al no poder acceder a los estudios de danza desarrollaron un estilo de danza en las calles.
Esta danza formó parte de un estilo de vida alternativo a las bandas delictivas y a la violencia, brindándoles la posibilidad de establecer lazos sociales y de expresarse de una manera creativa y no violenta.
Street dance (SD) es el término que se utiliza para describir estos estilos de danza que por naturaleza son danzas sociales, de mucha improvisación y contacto con el espectador y entre los bailarines.
La improvisación es el corazón de las danzas de la calle es por eso que la danza está es un constante desarrollo. Muchas SD incluyen encuentros o duelos conocidos como jamming. Los Jamm son un tipo de espectáculo informal que ocurre dentro del marco de una danza social. Los bailarines forman un círculo y por turnos, solos o en parejas, muestran sus habilidades mientras otros los observan y deciden quién es el ganador.