La madre de un alumno de 2º de la ESO que cursa la Secundaria en el Instituto de Tinajo llamó este lunes a la redacción de este diario para explicar que los alumnos del curso que está haciendo su hijo siguen esperando por las tarjetas electrónicas para la compra de libros de texto. Se trata de unas tarjetas de crédito implantadas este año en Primaria y 2 de la ESO que permite a los padres comprar los libros de textos con una subvención superior a los cien euros. Sin embargo, tres semanas después de iniciarse el curso escolar en Secundaria, los padres siguen sin poder adquirir los libros de texto.
La respuesta de Educación
Crónicas se ha puesto en contacto con el director insular de Educación, Juan Cruz, que explicó que se trata de una situación que afecta a los alumnos de 2º de la ESO de toda Canarias, no sólo a Lanzarote. De hecho, tal y como publica en su página web la Consejería de Educación, en la actualidad “se encuentra culminando la segunda fase del proceso de entrega de la tarjeta electrónica para la compra de libros de textos, fase definitiva para su uso gratuito en este curso académico 2008-2009. Una vez concluida la entrega a los alumnos de Infantil y Primaria, en esta fase se incluirán las tarjetas individuales de todo el alumnado de 2º de la ESO”.
Educación se compromete hacer llegar la tarjeta a todos los centros de Canarias en la primera quincena de este mes de octubre. El retraso se explica por el “proceso complejo que precisa, como requisito fundamental, que todos los centros envíen a la Dirección General de Promoción Educativa los datos completos de cada alumno o alumna, especificando su derecho a la tarjeta y matrícula en el curso correspondiente”. El comunicado del Gobierno canario añade que en “caso del alumnado de 2º de la ESO, la aportación de datos por parte de los centros se completó tras la evaluación de septiembre y hasta el día de hoy se están resolviendo las incidencias de última hora enviadas por ellos”. “La Consejería es consciente del inconveniente que puede suponer el no contar con el recurso de los libros de texto desde el primer día, pero confía en que la comunidad educativa sabrá articular recursos metodológicos alternativos para facilitar el proceso de enseñanza- aprendizaje”. Y en el contexto de este comunicado de la Consejería, no caben lógicamente ningún tipo de presiones a los alumnos y a sus padres por parte del profesorado. Y si en algún caso se dieran tales presiones, el director insular, Juan Cruz, insta a los padres afectados “a dirigirse a la inspección educativa con los datos del profesores o profesores”.