- Este primer concierto del guitarrista en Lanzarote se suma a una mini-gira
que lo llevará a otros escenarios de las islas
- Esta actuación organizada por el grupo TSC, cuenta con el patrocinio indispensable para este evento con poca capacidad de aforo, del Cabildo
de Lanzarote, a través del Área de Cultura; de la dirección de Centros de
Arte, Cultura y Turismo y del Gobierno de Canarias
En 1975 dio inicio a su carrera con Alan Parsons Project en compañía del compositor y cantante Eric Woolfson y de Andrew Powell, encargado de las orquestaciones. Su obra se caracteriza por construir Lps de rock progresivo con carácter conceptual, iniciados con “Tales of Mystery and Imagination” (1976), un disco basado en las narraciones extraordinarias de Edgar Allan Poe que contaba con la colaboración del mismísimo Orson Welles.
Entre los cantantes utilizados, además de Woolfson, se hallaban nombres como Terry Sylvester, Arthur Brown o John Miles.El mismo año de su publicación produjo el citado “The year of the cat” a Al Stewart, con quien repetiría en siguientes títulos, como “Time Passages” (1978).
Tras su debut, Parsons retornó con otro disco conceptual, “I Robot” (1977), trabajo en el cual adaptaba relatos de ciencia-ficción del escritor y científico Isaac Asimov. Entre los vocalistas se encontraba nada más y nada menos que Allan Clarke, el miembro de los Hollies, Steve Harley de Cockney Rebel o Lenny Zakatec, componente de Gonzalez.
“Pyramid” (1978) volvía a incidir en la creación de atmósferas, ahora ahondando en narraciones de leyendas y misterio y con una mayor influencia de los Beatles. Entre sus colaboradores se encontraba el ex cantante de los Zombies, Colin Blunstone. “Eve” (1979) recreaba el universo femenino y “The Turn of a friendly card” (1980) abordaba, siempre desarrollando composiciones de rock progresivo, el tema de los casinos y los juegos de cartas.
Su disco más exitoso fue “Eye in the sky” (1982), álbum que contiene el comercial single homónimo cantado de manera espléndida por Eric Woolfson y que marcó una tendencia hacia sonidos más pop. Aunque no alcanzaron ese volumen de ventas, otros trabajos posteriores como “Ammonia Avenue” (1984), con el fantástico single “Don’t answer me”, “Vulture Culture” (1984), “Stereotomy” (1986) y “Gaudí” (1987) fueron bien recibidos por sus seguidores gracias a una sugestiva disposición de texturas musicales que le han llevado a grabar algunos de los mejores discos del rock sinfónico británico.