La Policía Local de Arrecife ha retirado en lo que va de año un total de
202 vehículos abandonados de la vía pública, iniciando durante los
primeros ocho meses de 2011 un total 301 expedientes de coches y
motocicletas abandonados en las calles y solares de la capital. Cabe
destacar que 83 de estos vehículos eran ciclomotores que previamente
habían sido retirados al depósito municipal.
Según fuentes municipales, la concejala de Policía Local, Seguridad y Emergencias, Cristina Marrero,
ha mostrado su satisfacción con el comportamiento de la mayoría de los
propietarios de estos vehículos, si bien ha reiterado su llamamiento a
éstos "para que los retiren voluntariamente o autoricen su retirada a los
agentes municipales".
Desde el consistorio capitalino se ha insistido en que una ciudad como
Arrecife que pretende convertirse en la capital turística de la Isla, “no
puede dar una imagen deteriorada por culpa de la apatía de los
propietarios de estos vehículos”.
Tal y como explicó la edil, es importante que Arrecife se convierta en una
ciudad atractiva para el turismo y para ello debemos eliminar todo aquello
que afea a Arrecife”. “Nos hemos propuesto abrir la capital de la Isla al
turismo, a través de numerosas acciones como el Mercado Turístico y
Artesanal, que atrae cada sábado a miles de turistas, y para lograrlo, es
necesario que todos tomemos conciencia de que Arrecife debe ser atractiva
para que el visitante que viene a la ciudad se quede en ella y disfrute de
la capital de la Isla, tanto del centro como de los barrios”.
Procedimiento
Según el procedimiento para la retirada de la vía pública de un vehículo
abandonado, se presumirá racionalmente el abandono cuando permanezca
estacionado por un periodo superior a un mes en el mismo lugar. Desde ese
momento la Policía Local colocará en el mismo una diligencia adherida a su
carrocería.
Si transcurrido el plazo de un mes el vehículo continúa en el
mismo lugar, y habiendo sido notificado al propietario transcurre el plazo
para la retirada sin que la haya verificado, el vehículo será retirado por
la Policía Local y desechado como residuo urbano, dándose de baja por el
Ayuntamiento del registro de la Jefatura de Tráfico.