Hace tiempo que prometimos no entrar en las intrigas palaciegas de la política lanzaroteña del nuevo siglo. Produce demasiados dolores de cabeza. Sin embargo, en esta ocasión nos vemos obligados a hacerlo para aclararles a los habituales lectores del Zurriagazo cómo marchan las cosas en esto de los pactos que todavía quedan por hacer.
La semana pasada informábamos de los problemas que tiene el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL) en Yaiza, donde las constantes declaraciones de Gladys Acuña en contra de la oposición habían situado al Partido Nacionalista de Lanzarote (PNL) en una encrucijada, más tendente a presentar una moción de censura que a otra cosa. Alguien nos cuenta que ese fuego se ha medio apagado. Lo malo para el PIL es que hay otros fuegos: sigue abierto el de Teguise, que no termina de resolverse, y lo que es peor para sus intereses, se ha abierto uno importante en Arrecife.
Como es sabido, de no ser por las circunstancias que rodearon a la Operación Unión la moción de censura contra Enrique Pérez Parrilla se habría presentado sobre la marcha. Si a la Operación Unión se "unen" los problemas de Coalición Canaria (CC), formación que no termina de controlar a determinados elementos insurrectos que se empeñan una y otra vez en hacer la puñeta a Suso Machín -rodarán cabezas antes de las elecciones locales- y que han terminado desquiciando a la mujer que iba a tomar posesión en Tías para presentar la otra moción de censura que falta (el presidente de CC fue bastante cauteloso el pasado lunes cuando adelantó en el programa “A buena hora” de Crónicas Radio que Magdalena Cedrés iba a tener que renunciar al acta por “problemas personales"), lo de Arrecife se complica cada vez más. Y no hay que perder de vista al Partido Popular (PP), que sigue empeñado en buena lógica en que si no sale lo de Tías de lo de la capital ni se habla.
A pesar de todo, en este confidencial hemos sabido que las cosas han cambiado enormemente en cuestión de horas. Todo como consecuencia del enfado que tienen los concejales del PIL con la dirección de su partido. Emilia Perdomo, Antonio Machín y compañía están cansados de esperar, de ver cómo se utiliza Arrecife como moneda de cambio para solventar la situación de otras instituciones. Este enfado se lo han trasladado ya a la dirección de su partido, que de momento no ha hecho nada para que cambien las cosas. El secretario de Organización del PIL, Fabián Martín, es consciente de la importancia de Arrecife, de que sus compañeros de la capital aportan muchos más votos al partido que el resto. No obstante, parece que es partidario de no precipitar los acontecimientos. Sus compañeros no, quieren que la moción de censura se presente cuanto antes. De ahí que en las últimas horas se hayan producido movimientos y cambios.
Una vez que se da por hecho que lo de Tías va para largo, los concejales independientes están moviendo ficha para que se adelante lo de Arrecife. Lo han hecho incluso con enfrentamiento con la dirección de su partido, que les pidió que voten en contra de los presupuestos que se debaten el próximo lunes en el Consistorio capitalino. Ellos, los concejales (cinco de los siete porque José Miguel Rodríguez y Ubaldo Becerra no van al pleno si no es para votar una moción de censura), prefieren abstenerse, puesto que parte de esos presupuestos se ejecutaron en su mandato. Emilia Perdomo está dispuesta a dar la leña que corresponda, pero no quiere votar en contra porque no le parece lógico. Siendo este un problema interno importante, no deja de ser una anécdota si se compara con lo de la moción de censura. El cambio importante es que en el PIL han ofrecido al PP la Alcaldía, al parecer con la predisposición del PNL a renunciar a ella –estaba acordado que el candidato iba a ser Pedro de Armas-; todo, lógicamente, con la intención de acelerar el proceso y expulsar al PSOE de una institución que camina sin rumbo fijo desde mayo. Si el PP obtiene la Alcaldía de Arrecife se termina la excusa de Tías, ya no tiene que esperar, puesto que obtiene un botín político que no esperaba ni de broma, y que es evidente que su portavoz, Cándido Reguera, sabría aprovechar. En estos momentos se están estudiando todas las posibilidades, y la liebre podría saltar en cualquier momento.
En esas está la historia en estos momentos, según hemos ido recopilando de aquí y de allá. Algunos creen incluso que el lunes podría haber sorpresa: estaremos atentos.