martes. 06.05.2025

FITUR YA NO ES LO QUE ERA…

El austericidio aplicado en tiempos de crisis ha conducido a un terreno peligroso en el que Canarias no exhibe todo el potencial creativo que evidentemente tiene y que puede pagar. Atrás quedaron eso sí los tiempos en los que hordas de caraduras se desplazaban a Madrid para ir de compras o para pegarse tres o cuatro días a cuerpo de rey a costillas del pueblo. La guerra de la independencia propuesta por la Asociación de Municipios Turísticos ha resultado ridícula y poco práctica. Lanzarote ha vuelto a realizar un trabajo destacado por los empresarios y los especialistas del sector

La Feria Internacional de Turismo (FITUR) que todos los años se celebra en Madrid ya no es lo que fue. Y no lo es en lo bueno y en lo malo. Los más observadores han echado en falta algo más de imaginación y algo más de recursos por parte de aquellos que deben invertir para difundir de la mejor manera posible la imagen de uno de los sectores que sin duda alguna mueve la economía de nuestro país. En el caso de Canarias el tema está claro. El austericidio ha conducido a contar en la edición de este año con un pabellón ciertamente triste, que no refleja ni mucho menos lo que Canarias debe transmitir al mundo. Los encargados de presentar los mostradores y el conjunto que aglutinaba a las siete islas lograron crear un espacio de oficinas enormemente funcional y práctico pero ajeno por completo a la misión que debe cumplir este tipo de estructura, que no es otra que llamar la atención. Es probable que la culpa no la tenga en su totalidad la Consejería de Turismo del Gobierno autónomo que dirige ahora el lanzaroteño Isaac Castellano, recién aterrizado en el cargo y con poco margen para haber elegido nada de lo que se ha presentado en la capital del Reino. Pero parte de culpa sin duda hay que achacarle. Sin recursos, sin imaginación, se consigue lo que se ha conseguido este año, una esquina enorme por la que la gente pasaba sólo por lo que saben que son las Afortunadas, en esta ocasión absolutamente Desafortunadas. En tiempos de bonanza económica, cuando la gente no reparaba tanto en los gastos de la Administración pública, se hicieron auténticas virguerías, templos de la creatividad y de las ganas de agradar que de forma sistemática se llevaron el galardón por ser los mejores de la feria. Hemos pasado de un extremo al otro. Bastaba con pasar por Andalucía, una de las principales competidoras en el mercado nacional, para determinar la diferencia. Y qué decir del pabellón de los países de Sudamérica, trabajos como Costa Rica, México o Panamá determinan lo mal que se ha hecho en Canarias. Eso sí es saber vender, esos sí han entendido que una imagen vale más que mil palabras.

Hubo un tiempo no muy lejano además en el que Canarias era visita y parada oficial para los Reyes de España. Ni de broma la Casa Real desviaba su camino de uno de los puntales del turismo. No en esta edición de 2018, donde Felipe y Letizia ni se dejaron caer por allí, y se fueron a otras Comunidades acompañados de unas medidas de seguridad extrema y del habitual séquito de políticos del día. Tal vez, sólo tal vez, no llegaron esta vez porque buscaron las Islas por todas partes y no encontraron nada que les recordara a lo que tan bien conocen.

Pero el aspecto positivo del austericidio actual lo refleja el nivel de trabajo y de compromiso de aquellos que acuden a FITUR. Son los que deberían estar y son los que están. Atrás quedaron las ediciones en las que hordas de políticos, esposas, maridos, amantes, parientes y algún que otro trasto viejo se desplazaban a Madrid con todos los gastos pagados para disfrutar de dos o tres días de auténtica bacanal. Fueron los tiempos del destape financiero, los tiempos en los que se cerraban restaurantes y se reservaban hoteles completos para mayor gloria de los que pensaban que el dinero público era inagotable. Por suerte, al menos en Canarias, aquello ya pasó y se debe recordar como un mal sueño. En el caso de Lanzarote estuvieron todos los que tenían que estar: Echedey Eugenio y su equipo al frente de la Consejería de Turismo del Cabildo, incluyendo a Héctor Fernández en la Sociedad de Promoción Exterior y José Juan Lorenzo como máximo responsable de los Centros Turísticos; los concejales de Turismo de Teguise, Antonio Callero, de Yaiza, Olga Caraballo, de Haría, Soraya Brito, y de Tías, Amado Vizcaíno, todos ellos de municipios turísticos salvo el norteño y de partidos nacionalistas, si es verdad que Vizcaíno sigue siendo de Coalición Canaria (CC) y no se ha pasado ya oficialmente al Partido Popular (PP); el alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, la alcaldesa de Yaiza, Gladys Acuña, y Luis Arráez, como vicepresidente segundo del Cabildo que es sustituyendo a Pedro San Ginés en la jornada inaugural. Todos los que estuvieron curraron, algunos bastante. Luego es cierto que hubo algún político más que se dejó ver por la feria, alguno con justificación y alguno sin ella. Es el caso de los nuevos consejeros del Gobierno del Cabildo Ángel Vázquez y Saray Rodríguez. El primero explicó que fue por allí porque tenía un encuentro del Saborea España y una reunión con su compañera Matilde Asían, secretaria de Estado de Turismo; la segunda no se sabe si fue representando al Cabildo o al Ayuntamiento de Tías en sustitución del alcalde.

Hasta Madrid llegaron también los ecos de una polémica sobre la presencia de Arrecife en FITUR. Ecos porque representantes del Ayuntamiento capitalino no hubo en Madrid a los que preguntar, ni técnicos de la institución. Por tanto, ni se presentó nada de Arrecife ni hubo nadie de Arrecife que vendiera las bondades que también tiene este importante municipio.

Los de la independencia

Una de las imágenes de la feria fue sin duda el ridículo papel que jugaron los ayuntamientos que se han reunido bajo el paraguas de eso que ellos llaman Asociación de Municipios Turísticos de Canarias. Si fueran todos, el nombrete de marras estaría bien, pero es que por allí se pudo ver a cuatro o cinco (Costa Adeje, Maspalomas, Mogán y Guía de Isora) ocupando un enorme espacio en una esquina pegada al pabellón de Canarias que no tenía mucho sentido. Se esforzaron en hacer ruido y en dejarse ver, desplazando a más técnicos y políticos que nadie. Ahora, el espectáculo liderado por el ex todopoderoso consejero de Economía del Gobierno y ex diputado nacional José Carlos Mauricio fue lamentable. Esto no es una opinión subjetiva de este confidencial, es exactamente lo que se repetía una y otra vez en los tradicionales corrillos que se organizan en una feria donde una de las cosas que más se hace es hablar. Es una opinión bastante extendida entre los que realmente saben cómo se mueve y cómo se debe mover el turismo en las Islas. Como ha explicado este lunes en Crónicas Radio-COPE Lanzarote Echedey Eugenio, no ha sido más que una pataleta independentista promovida por un grupo de municipios que han querido hacer política jugando con el nombre del Archipiélago. Y les ha salido mal la jugada. La marca es y seguirá siendo Canarias.

Los que estaban de enhorabuena fueron sin duda los representantes de Arona. Estos se tendrían que llevar el premio a los independentistas del año dentro de los independentistas. No conformes con haber logrado poner su nombre a todo un SEAT de última generación, los de Arona se prepararon su propio chiringuito. Como no les debieron dar espacio al lado de los otros independentistas, se fueron al pabellón de los países de Sudamérica, y allí se colocaron, pegaditos a Colombia, aprovechándose de la cantidad de curiosos que acudían allí atraídos por el olor del café recién molido. Debieron gastar recursos en su Ayuntamiento, porque hicieron varias presentaciones, algunas con rostros tan conocidos como el de la cantante Alaska. El alcalde socialista, José Julián Mena Pérez, sonreía. No era para menos. De momento a Arona le va mucho mejor que al resto de independentistas.

Hubo gente que también mezcló la política con la feria. Muchos de los visitantes se negaron a pasar por el pabellón de Cataluña, y es cierto que en momentos puntuales presentó un aspecto desolador. No fue el caso de este medio de comunicación. Les visitamos, hablamos con ellos, nos dimos cuenta de lo hartos que están también del proceso de independencia y de lo mucho que tienen que ofrecer como puntales que siguen siendo del turismo español. Para llamar la atención de la gente, además, acudieron con el coche de un madrileño que triunfa en un deporte tan complejo como es la Fórmula 1, el Toro Rosso que condujo antes de fichar por Renault Carlos Sainz.

Ni la independencia de Cataluña, ni la independencia de los municipios canarios. Ninguna de estas opciones llegará lejos. Seguro.

Despliegue de la COPE

Si no fuera el grupo de radio hermano de este periódico, tendríamos un problema. Pero como lo es, no lo tenemos. No hace falta que disimulemos obviando el fantástico trabajo que ha realizado la COPE en FITUR. No había un solo pabellón, ni una sola Comunidad Autónoma, en la que no hubiera un improvisado estudio de la emisora.

Canarias no fue una excepción. Al frente de COPE, como siempre en este tipo de eventos, el periodista Máyer Trujillo, que realizó varios directos desde Madrid haciendo que pasaran por los micrófonos de su programa todos y cada uno de los protagonistas de la feria. A su lado, además del equipo técnico y comercial de la casa, el jefe de informativos en las Islas, Santiago Morellón. Pero no sólo ellos, también la gente de COPE Lanzarote, con el periodista Alfonso Canales y el resto del equipo haciendo constantes conexiones y uniendo la Isla con la capital, y el equipo de COPE Fuerteventura, haciendo también un enorme despliegue con la periodista Mónica Quintero al frente.

Ninguna otra emisora ha hecho algo así, y ninguna otra emisora une las islas como lo está haciendo la COPE. En breve sabemos que habrá novedades importantes.

FITUR YA NO ES LO QUE ERA…
Comentarios