Pues no, estimados lectores, insistimos en que Celso Betancor no está perdiendo el tiempo en estos días. Más bien al contrario. Anda por estos mundos de Dios con las orejas bien abiertas, escuchando todos los zumbidos que tiene alrededor, que no son pocos. Ya les adelantamos en días anteriores que el representante de Asamblea por Lanzarote (ApL) tiene el visto bueno de sus compañeros para escuchar todo tipo de ofertas, porque todavía no se ha cerrado el acuerdo definitivo con Coalición Canaria (CC), un acuerdo que muchos daban por hecho sin haber hecho méritos suficientes para cerrar las cuestiones fundamentales. A todas estas, y aprovechando que tiene que ir casi todas las semanas a Tenerife para asistir a las sesiones que se celebran en el Parlamento, Don Celso habló con varios dirigentes de Nueva Canarias (NC-NGC), con los mismos que están que trinan de contentos después de comprobar que en la encuesta que publicaba esta semana Canarias Ahora se les daba entrada directa en la Cámara autonómica, gracias sobre todo a los votos de Lanzarote y Fuerteventura. Estas conversaciones de Asamblea y Nueva Canarias tienen a alguien que sabemos, alguien que va por la vida con la guitarra desafinada y con bastante chorrillo, más que preocupado. Se está dando cuenta de que la prepotencia del ayer se le puede venir en contra. Uno de estos prepotentes es el bueno de Moctezumita, que algunos le han visto muy mal, casi con descomposición, tan mal incluso como Don Pepa y Don Elvis. Lo último que nos cuentan de Moctezumita es que se le ha visto formando un curioso dúo, nada más y nada menos que con El Rey II. Las malas lenguas aseguran que se les pudo ver en conversación animada mirando al lago y con la idea de montar torres, porque lo importante para ellos, a parte del lago, es la información.
