Este jueves se desarrolló un más que interesante debate en Lanzarote Radio sobre un tema del que muchos ciudadanos llevan hablando desde hace tiempo y que se rehuye bastante en los habituales foros de análisis de la actualidad, los increíbles sueldos que tienen algunos políticos de Lanzarote.
Decimos “algunos” porque no hay nada peor en estos casos que establecer una generalización gratuita que obligue a pensar que son todos iguales, cuando no es así ni mucho menos.
De todos modos, está muy bien que se hable de un asunto que también preocupa a los ciudadanos, que preocupa a los contribuyentes que con sus impuestos hacen posible el milagro de los panes y los peces dinerarios. Está muy bien sobre todo que en los partidos políticos empiecen a hacer cribas para averiguar quién realmente se está ganando el sueldo como liberado y quién no, no vaya a ser ahora que se acercan las elecciones que se vuelve a colocar en las listas a los mismos que no sólo no han dado un palo al agua sino que ni siquiera se pasan por las instituciones a cobrar. No es la primera vez que se ha tenido que informar de la existencia de políticos y asesores de políticos a los que había que llevar el sueldo a casa.
Lo que para unos supone una excesiva profesionalización de la gestión pública para otros no es más que la recompensa a una dedicación exclusiva para gestionar el bien común. Andrés Stinga abrió la caja de los truenos al asegurar que en su municipio los responsables del Ayuntamiento han cobrado en diciembre más de 6.000 euros. El portavoz del Partido Socialista (PSC-PSOE) en San Bartolomé acusó ayer a los ediles del grupo de gobierno de la localidad de cobrar “unos salarios astronómicos” que a su juicio “no se corresponden con el papel desarrollado en la institución”. Sin pelos en la lengua, tal y como explica este diario en su edición de hoy, el concejal socialista señaló directamente al equipo que encabeza Miguel Martín como uno de los “mejor pagados” de la Isla en función de la labor que desempeñan como cargos públicos.
Por su parte, el portavoz de Alternativa Ciudadana 25 de Mayo (AC-25M) en el Ayuntamiento de Arrecife, Andrés Barreto, hizo suya la reivindicación planteada por Stinga y se quejó también del “desorbitado” sueldo de los miembros del grupo de gobierno capitalino. Según Barreto, un concejal liberado, es decir, con dedicación exclusiva a las gestiones municipales, cobra unos 2.800 euros netos mensuales, a excepción de la alcaldesa, María Isabel Déniz, cuyos ingresos mensuales superan los 6.000 euros. Para el edil alternativo estas cifras “astronómicas” derivan de la “excesiva profesionalización” que se ha hecho de la vida pública.
El alcalde de Tinajo, Jesús Machín, salió en defensa de sus compañeros de grupo y en el suyo propio ante las críticas del concejal alternativo y aseguró que en su municipio “todos los concejales liberados cumplen escrupulosamente con sus labores en el Consistorio”.
Insistimos en que el debate es muy interesante, en que se debería mirar con lupa a partir de este momento quién ha trabajado y quién no, quién se ha dedicado en sus bien remunerados puestos de trabajo a administrar la rutina. Este jueves el Grupo de Senadores de Coalición Canaria (CC) envió unas curiosas estadísticas a la prensa, en las que, por entresacar el dato más llamativo, se descubre que el senador nacionalista por la isla de Tenerife, Ricardo Melchior, ha presentado en la legislatura nada menos que 1.786 preguntas más que el senador socialista por la isla de Lanzarote, Marcos Hernández. ¿Quiere decir esto que nuestro senador es uno de esos políticos que está cobrando sin trabajar? No lo sabemos, aunque creemos que sus compañeros de partido deberían analizar el caso, como en otros partidos -aquí no se salva ninguno- deberían analizar otros casos similares.