Con esto de que somos una Región Ultraperiférica (RUP) Canarias cuenta con todo tipo de desventajas. Y no nos estamos refiriendo ahora al acuciante problema de la inmigración irregular. Tampoco nos referimos a los problemas lógicos que se producen derivados de la lejanía. Nos referimos al hecho indudable de que como Comunidad Autónoma, como una de las diecisiete Comunidades Autónomas que conforman el Estado español, se encuentra a la cola en casi todas las estadísticas.
En la jornada de este lunes previo a la fiesta de la que disfruta todo el país el martes en pleno mes de vacaciones, nos hemos enterado de que los trabajadores canarios cobraron de promedio en 2005 un 16 por ciento menos que los trabajadores del conjunto del país, pese a que el coste laboral promedio por trabajador se situó en 282, 04 euros por debajo de la cifra nacional. Estos datos se unen al hecho de que Canarias tiene una de las cestas de la compra más caras del Estado, lo que, si además lo unimos al hecho de que contamos con los precios más elevados en las viviendas junto a comunidades como Madrid, Cataluña o País Vasco, dejan a los trabajadores en muy mala situación. Tanto es así que el nivel de vida de los canarios, la satisfacción con la que afrontan cada mes, está en estos momentos por los suelos, puesto que son muy pocos los ciudadanos que pasan holgados los treinta días entre paga y paga.
Cabe reseñar, además, que en el análisis por comunidades autónomas, Canarias ocupó en 2005 el segundo lugar en lo que se refiere a menor coste laboral, tras Extremadura, que es la Comunidad Autónoma donde la remuneración bruta que recibe un trabajador es más baja. La Comunidad de Madrid es, por el contrario, la que mayores costes laborales registró de promedio en el año 2005.
El coste laboral por trabajador y hora efectiva en Canarias fue de 12,59 euros de promedio para el total de sectores de actividad, situándose 2,85 euros por debajo del nacional. La industria canaria se presentó con 13,82 euros como el sector con un coste más alto, aunque, es el único que sufrió una reducción de su coste laboral por horas (0,43%). En el ámbito nacional, la industria es el sector con mayor incremento de esta variable (3,97%).
Son datos lo suficientemente contundentes como para que deriven en una reflexión de nuestros gobernantes. La primera la debe hacer el Ejecutivo regional que preside Adán Martín, que debe sumar este problema a los muchos que ya tiene en el zurrón, puesto que no sólo se puede estar pensando en la tragedia que se vive con la constante muerte de seres humanos que intentan alcanzar estas costas. Adán Martín debería mantener un encuentro serio con su consejero de Economía y Hacienda, José Carlos Mauricio, quien a su vez debería pedir explicaciones sobre lo que está ocurriendo. Estos datos indican que los canarios están perdiendo calidad de vida, y sin calidad de vida es muy complicado encontrar una ciudadanía satisfecha.
El sector industrial, tanto en Canarias como en el conjunto del Estado, fue el que tuvo con costes laborales más altos en el año 2005, con una media anual de 2.037,50 euros por trabajador y mes en el Archipiélago, 382,61 euros menos que el coste soportado por el conjunto de industrias en el territorio nacional, que fue de 2.420,11 euros.
Otro indicador que muestra claramente por donde van los tiros de la economía actual es el de la construcción. La construcción en Canarias fue el sector con un mayor incremento en sus costes laborales (4,15%), mientras que en el ámbito nacional es el sector que menos los ha incrementado (2,81%). Esto quiere decir, a pesar de la percepción general, que la construcción sigue siendo un sector que mueve dinero, que mueve trabajadores y que sigue exigiendo mano de obra.
Por último, hay que destacar que según los datos recogidos en el Anuario Económico de la Cámara de Comercio, tanto las horas pactadas, como las pagadas (horas trabajadas y no trabajadas remuneradas) y las horas efectivas (horas realmente trabajadas incluyendo las extraordinarias) se redujeron en Canarias y en el ámbito nacional en 2005 respecto al año 2004. La mayor reducción se produjo en las horas efectivas (0,71% en Canarias y 0,62 en la media nacional). Las horas pactadas por trabajador y mes en Canarias en el total de sectores fue en 2005 de 160,8 horas, 3,3 más que las pactadas en el ámbito nacional (157,5 horas). Lo mismo ocurre con las horas pagadas, que superan en Canarias a las nacionales en 3,2 horas. En las horas efectivas, se amplía la diferencia entre lo ocurrido en la región y en el ámbito nacional. Las cifras indican que en Canarias se trabaja 3,8 horas más de media al mes que en el conjunto del territorio nacional.