1.- A lo que fue Pedro Sánchez a Washington era a un seminario político, con una matrícula de unos 800 euros –es decir, que no parece gran cosa–. Igual que él asistieron periodistas, directivos de tipo medio, etcétera, de muchos países. No fue, como él mismo dijo, a apoyar a Hillary Clinton, a la que ni siquiera conoce, ni Hillary sabe de su existencia. El derrotado ex secretario general del PSOE le ha cogido el gustirrinín a los Estados Unidos y ahí sí tiene mucho que aprender: Hillary felicitó a Trump por su triunfo electoral y aceptó la derrota; Obama le prometió al ganador republicano una transición modélica; y Trump salió de la casa Blanca hablando maravillas de Obama. Igualito que Pedro Sánchez con Rajoy, al que ha insultado gravemente; o aquello tan contumaz de que “no es no”. Así le ha ido a unos y a otros. Trump es un ganador y Sánchez, salvando todas las distancias, un perdedor nato. Un perdedor recalcitrante. Si hubiera ido a los Estados Unidos a hacer visible su apoyo a Clinton, pues tendría que haber viajado a Nueva York, donde se encontraban los cuarteles electorales de los candidatos, no a Washington, a asistir a un seminario de 800 dólares la matrícula. Pedro Sánchez tiene boca de pobre y así no se va a ninguna parte. Pedro Sánchez está más acabado que Machín, por lo que ni siquiera ha empezado la vuelta a España pero sí ha pedido la indemnización que ofrece el Congreso a los que dejan de ser diputados. Sánchez no regala nada. Mejor que se busque un trabajo o que llame a Jordi Évole a ver si lo coloca en uno de sus programas. El último, con su presencia, fue una especie de tumba política para un socialista muy torpe, que partió en dos el partido y al que le ha desertado casi toda su tropa. Yo creo que sólo le quedan dos o tres. Se le han ido hasta Hernando, Luena y Pachi López, que eran parte de su guardia pretoriana. Incluso Pachi López se postula para sustituirlo. Yo no digo que sea tan malo como político como Sánchez, porque eso es imposible, pero tan sectario, sí.
2.- Ni Linares, ni Clavijo, ni Barragán, ni el torpe de Ruano. No los convencen. Los concejales de CC del Puerto de la Cruz y de Arico no van a entregar las alcaldías de sus municipios al PSOE, lo mismo que el PSOE no va a renunciar a la Alcaldía herreña de La Frontera. Esto es un sálvese quien pueda. CC no es el PSOE, que mantiene el principio de autoridad; CC es una panda de amiguetes que ni siquiera tienen ideología. En CC no manda nadie y el partido, o la coalición, se sostiene por puro interés. Si le quitas a CC los 800 enchufados que tiene en las instituciones canarias, adiós partido. Porque todo esto nació con germen de asociación de vecinos; y ya lo ven en la tele, asociación de vecinos igual a aquí no hay quien viva. No manda nadie en esta nuestra comunidad. Los del Puerto y los de Arico no van a dimitir, se van a quedar. Y es lo más razonable. ¿Qué culpa tienen, por ejemplo, los ciudadanos del Puerto de la Cruz de que CC sea un pollo sin cabeza? ¿Se merecen ahora un Ayuntamiento gobernado por el PSOE y por qué PSOE, madre mía, que Dios nos libre? No. Porque esto significaría un desastre para el Puerto. Lo mismo en Arico. ¿Quitar a una alcaldesa de CC para colocar a otra del PSOE? Dejen las cosas como están, hombre.
3.- El PP quiere sacar una ley para prohibir los memes. Lo que me quedaba que oír, que lo más gracioso de la Internet sea cortado de un plumazo por el dedo inquisidor de la derechona. Yo no me lo creo. Los memes son la cosa más divertida que se puede ver cada día en las redes sociales, en medio de tantas desgracias. Espero que al PP se le quite esa idea de la cabeza. Qué torpes son, coño, pero qué torpes.