1.- No es verdad que el comercio haya experimentado un aumento sustancial en las compras de los clientes este diciembre pasado y este enero que empieza. Es cierto que las ventas se han incrementado, pero no más de un 3%, lo que no es casi nada teniendo en cuenta el triunfalismo del Gobierno de Rajoy. Así que no me vengan con pamplinas, ni con gestos hacia las organizaciones comerciales para que éstas muestren su satisfacción en los medios de comunicación. Es, sencillamente, mentira que el consumo se haya activado y que éstas sean las Navidades de la recuperación. Leche de machanga.
2.- Otra de las cosas graves para el pequeño comercio es que los grandes centros comerciales se lo han comido. Y no es justo. Yo no tengo nada contra los grandes centros, todo lo contrario, pero sería más justo un apoyo de la administración estatal, autonómica y local al pequeño comercio, que crea puestos de trabajo y que maneja unos productos diferenciados y atractivos. Podrían empezar por pasear a los cruceristas por Santa Cruz, en vez de tenerlos de gira por la isla. Pero el Ayuntamiento, las consignatarias y la Autoridad Portuaria nunca han llegado a acuerdos al respecto. Pónganse en ello, hombres.
3.- En Santa Cruz han caído comercios como “Maya”, por todo lo que estamos diciendo. Y el resto del comercio hindú, que merece un homenaje de los tinerfeños por lo que le ha dado a la isla, lleva el mismo camino, con algunas excepciones. Y éste era un activo muy importante para nuestra tierra. Un comercio de confianza y de respeto. Luego que no eche el Gobierno de Rajoy las campañas al vuelo sobre el consumo en estas Navidades. Porque sigue siendo patético, como patético es el Gobierno de Rajoy.
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