7 de febrero de 2007, 14:02
Impresionante el testimonio de Liselotte Drescher, la anciana alemana que fue salvada de morir ahogada, en El Hierro, por dos guardias civiles. El sargento Francisco Rodríguez y el cabo Gerardo Arriola merecen una medalla por el desprecio que hicieron de sus vidas para rescatar a un semejante. La riada se llevaba a Liselotte al mar; ellos lo impidieron con su arrojo. Enhorabuena. Una vez más, la Benemérita estaba allí.
Andrés Chaves