1.- El BBVA -no tengo cuenta en ese banco, ya no me abren cuentas- ha comprado Simple, una aplicación de banca superinteligente, por 85,4 millones de euros. Los clientes de Simple, con una tarjeta de crédito, hacen virguerías y con el móvil pueden controlar su vida. Incluso la aplicación les enseña a ahorrar. Simple, ya digo, le ha costado al BBVA 85,4 millones de euros, pero cuando se ponga en práctica entre sus clientes será una maravilla. Mi primera Visa me la dio el Banco de Bilbao, cuando trabajaba en un periódico de aquí. Eran las primeras tarjetas que aparecían en el mercado en España, aunque yo ya disponía del Diners Club, con la que viajé a todas partes siendo casi un niño. El Diners cayó mucho, pero no sé por qué. Quizá porque Visa-Master Card se lo comió, lo mismo que se comió a American Express. Simple es un banco inteligente, pero se hace difícil explicar aquí cómo va a funcionar en todos sus términos. Francisco González , presidente del BBVA, me parece el banquero con más visión de futuro de nuestro país. No olvido a Emilio Botín .
2.- Que ni chiquito personaje, yo, más pobre que las ratas, hablando de servicios bancarios. Una vez, mi buen amigo José Luis Marauri , paz descanse, a la sazón director general del Santander, en la noche de los tiempos, me dijo que para su banco eran rentables las cuentas que mantenían una media de más de 70.000 pesetas. Cómo cambia la cosa, pero tal y como se ha puesto el panorama lo mejor es el calcetín, porque así no te embarga el ayuntamiento por olvidarte de pagar tal o cual impuesto municipal. Recuerdo los buenos tiempos del Santander y envío un gran abrazo a mi buen y lejano amigo Eugenio Vera .
3.- Pero siempre me ha caído simpático el BBVA, que es un banco que no habla mucho y que es el segundo o el tercero -no sé bien- de España, con Santander y La Caixa y, además, patrocina la Liga de las Estrellas. Los amigos míos potentados -que van quedando menos- usan una American Express llamada Centurión, que es negra como mi propia suerte. Con ella puedes comprar un coche, hoy mismo, en el concesionario. La sacas y te ponen la alfombra roja. Es maciza, no sé si de platino o de qué, pero puedes abrir una lata de bonito del norte metiendo la punta en un ladito. Bueno, quería hablarles de Simple y me he ido por las ramas. Ya verán qué gozada.
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