No se pueden imaginar la cantidad de ojos y oídos amigos que tenemos en toda esta santa y sufrida tierra. Es lo que nos permite enterarnos de todo, o de casi todo. Sin ir más lejos, un buen amigo nos llamó este lunes para informarnos de que había asistido a una curiosa conversación en el Cabildo en la que participaban nada más y nada menos que el Bolchevique, el Picudo Rojo y alguien del PIL. Según lo escuchado por la fuente, el Bolchevique estaba presumiendo a voz en grito de que tenía una información privilegiada. “¿Qué información?”, le preguntaron todos a coro. “Que Agustín Acosta va a cerrar la radio esta semana”. Todos se quedaron con cara de bobos, incluyendo al Picudo que ya la trae de fábrica, y pusieron en duda la información. El Bolchevique, que se veía acorralado, se tuvo que defender: “Que sí, que está confirmado, esta misma semana se termina la radio esa”, soltó para afianzarse en su “notición”. ¡Échenle guindas al pavo! O sea, que resulta que nuestro querido y admirado Bolchevique tiene más información de nosotros que nosotros mismos. Semejante tolete, conocido por su impagable lealtad (muy parecida por cierto a la de Mister Armario), vive permanentemente obsesionado con lo que pasa por esta orilla informativa. Qué le vamos a hacer, el pobre no da para más. Que no se preocupe ni él ni el resto de los que nos quieren ver muertos, que muy pronto tendrán noticias. ¿Serán buenas, serán malas? Tendrán que esperar. Mientras tanto, que sigan especulando y que sigan diciendo boberías. Es lo que tiene ser bobo, que sólo se pueden decir boberías.
