Inés Rojas tiene como todo mortal defectos pero nadie le puede negar una entrega encomiable a su quehacer político-administrativo. Parece estar en todo sin escatimar esfuerzo alguno y así nos sorprendía ayer en Lanzarote Radio cuando manifestada su disconformidad con lo que Aena tenía previsto en su plan de acción aeroportuaria para Lanzarote. No está de acuerdo la Presidenta en que se nos quiera vender gato por liebre osease callarnos la boca con unas chapuzas que en modo alguno permitan solventar los problemas graves que tiene nuestro aeropuerto y que de no resolverse nos meterían en la senda de la involución. Doña Inés no dé un paso atrás en esta lucha ni tan siquiera para tomar impulso. Lanzarote requiere de políticos con mayúscula que den la cara allí donde fuera menester con las ideas claras y la convicción plena de que están sirviendo a los intereses sagrados de la isla. Intereses que en más de una oportunidad se han visto cercenados por las inoperancia, desidia e incapacidad de unos pocos políticos del tres al cuarto. Ánimo Presidenta y p'alante.
Ojalá en Lanzarote olvidemos luchas fraticidas y amasijos de intereses y todos, absolutamente todos, seamos consecuentes con la tarea que tenemos que desempeñar. Otro gallo nos cantaría a la hora de situar a la isla en el tren del progreso y no como ahora que está en el vagón de cola.