Alguien, con gran sentido del humor o de la realidad conejera, está tratando de poner en marcha una especie de museo de “los arretrancos”, que no es otra cosa que una exposición de caricaturas de los más singular que se pueda observar. Hemos podido ver al calvo multiforme, el vinagre, la pulga cojonera, perunera, la barrilete etc, etc... en posiciones un tanto peripatéticas que son el reflejo de la realidad inútil de este Lanzarote de nuestros amores y también de los pecados capitales de esta tropa penosa.
Algunos de los no nominados ahora han sido dibujados con cuatro patas tipo burros, creo que con gran tipo porque sus actos, de presente, son más propios de “plateritos” que de políticos en el ejercicio profesional de sus actividades.
Esperemos que la ciudadanía en cuestión -(la paridora de la original idea es mujer)-encuentre el aliciente necesario para que el tal proyecto del museo se haga realidad pronto. Claro que los dibujados “desfigurados” no se sentirán felices porque no da alegría que a uno le definan tal como sus propias obras le retratan.
A la espera estamos de la culminación de la idea que nos parece hasta brillante y por supuesto necesaria.
