¡Chiquita movida se ha formado!, y no nos referimos precisamente a la de los medios de comunicación, que de esa ya contaremos algo más adelante. Nos referimos a la movida política, que tiene tela marinera. Resulta que ha habido reuniones, y va a haber más. La gente está nerviosa, y se percibe en el ambiente, lo que provoca -otra cosa más- que nuestros representantes públicos trabajen menos en las instituciones que el sastre de Tarzán. Pues sí, mientras algunos están de reunión en reunión otros se dedican a hacer viajes a Lourdes, para realizar todo tipo de peticiones. Se trata de un grupo que está de rogativas, gente que está desfilando hacia allá con aguas no bautismales, sino de redención. ¿De qué redención se trata? Estén muy atentos, porque algunos que lanzaban sus dardos envenenados pensando que no iban a tener respuesta resulta que se han terminado envenenando. Es por así decirlo el efecto rebote. Y para rebote el que tienen estos días el Bolchevique y el Berberechito Cornúpeta, que están viendo cómo se les termina determinado chollo. Ya les contaremos cuál.
