La gente a veces no tiene consideración con nuestros pobres y sesudos políticos. Con lo que ellos trabajan. En fin. Les vamos a contar hoy la curiosa historia de un grupo de políticos con representación en el Cabildo de Lanzarote que se reunió este lunes en un hotel de Costa Teguise, tipo concentración futbolera. ¿Su misión? Pues no era otra que analizar de forma detallada y concienzuda los no menos detallados y concienzudos presupuestos de la Primera Corporación insular, los cuales, al menos que nosotros sepamos, siguen todavía sin ser aprobados. Nos cuentan que en la concentración, en la que sólo había gente del Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), se miró con lupa el borrador de presupuestos que les habían entregado sus socios de gobierno. Miraron y miraron, y parece que no encontraron algunas cosas que esperaban que estuvieran allí. Como no tenemos micrófonos de esos que utilizan los espías en las películas no les podemos explicar exactamente lo que se llegó a decir en ese curioso encuentro de Costa Teguise. Ahora bien, lo que sí que sabemos es que hubo caras raras, caras muy raras. ¿Por qué?
