Como saben bien los asiduos a esta sección, el Petudo Ladronzuelo es un individuo cuyo único mérito en la vida ha sido el de prosperar adueñándose de algo que no era suyo, algo que había costado sudores y alguna que otra lágrima levantar y mantener. Como saben también, no estuvo solo para perpetrar la “hazaña”, contó con ayuda externa, entre otros, de algún que otro traidor arrastrado y miserable como el Petudo y sus secuaces, capaces todos ellos de matar y vender a su madre, como diría Cantinflas, por un puñado de dólares. El tiempo, como suele suceder, les ha colocado en su sitio, y les seguirá colocando más todavía, en una sociedad pequeñita como es la nuestra pero inteligente como pocas, que sabe distinguir la paja del trigo sin demasiadas explicaciones. Ahora parece que al Petudo Ladronzuelo, que le ha cogido el gusto a eso de apoderarse de cosas que no son suyas, ha sido cogido con las manos en la masa musical en compañía de otro de los integrantes de la banda, el Revolucionario Bolchevique. ¡Chiquita panda, desde luego, están haciendo carrera! Lo malo es que se les termina el cuento y el crédito, sobre todo por sus múltiples aciertos y por sus absurdos pronósticos. Como videntes no tienen precio. Ya les contaremos más.
LOS NEGOCIOS DEL PETUDO Y EL BOLCHEVIQUE
28 de enero de 2008, 5:48