Nos resulta tremendamente curioso comprobar las maniobras que intentan hacer por detrás algunos bobos de capirote que se piensan que Lanzarote es más grande de lo que es, que no saben además que aquí suelen llegar todos los chismes, sobre todo los que atentan contra nosotros como medio de comunicación. Es el caso protagonizado por El Ladilla y El Homo, que no contentos con mentirnos a cada paso, dándonos siempre la de arena y pensando que somos tontos, tratan de enredar a los demás, concretamente a aquellos que creen que les escuchan y les hacen caso. Pues bien, estimado Ladilla y estimado Homo, la cosa no es como ustedes piensan, más bien al contrario. Muy pronto se va a saber toda la verdad de determinado comportamiento político, y a más de uno se le va a poner la cara colorada. Y de cara, lo que se dice de cara, estos tienen mucha. Por cierto, que aceptamos las disculpas de aquellos conocidos de estos dos personajes que nos aseguran que nada tienen que ver ni con sus comentarios ni con sus actitudes. El tiempo coloca a todo el mundo en su sitio. Si no, que se lo digan al Petudo y a la Dama Boba, de quienes, por cierto, estos dos personajes también son muy amiguitos y se dejan bastante asesorar.
EL LADILLA Y EL HOMO
17 de enero de 2008, 5:08