El ex concejal del Partido Popular (PP) en Yaiza José Carlos Rojas dijo este lunes en una de las tertulias de esta casa que la campaña que Doña Rita ha hecho para meter un turista en nuestras vidas es una “solemne majadería”. Suscribimos plenamente las palabras de este joven y brillante abogado, y estamos de acuerdo también con él en que es un dinero absurdo botado a la basura que alguien tendrá que justificar. Es más, alguien debería haber parado el disparate de una campaña sin sentido que ha estado muy mal enfocada y muy mal explicada a la población, que todavía no entiende de qué va eso de “poner un turista en sus vidas”. Eso si lo que se buscaba no era otra cosa que favorecer a los medios que le ríen las gracias a Doña Rita. Si es así, el objetivo está cumplido, porque todos ellos recibieron la correspondiente cuota publicitaria. Por cierto, y hablando de publicidad y de compromisos publicitarios, seguimos sin saber nada de Ñeño Barrilete. Este ya se ha olvidado del turbio asunto en el que está envuelto. Siendo político como es debería tener más cuidado con determinadas grabaciones. Cualquier día de estos salta el escándalo, escándalo por cierto que afecta a varias personas de su partido. Todo se andará. Echando un vistazo a la prensa provincial nos hemos dado cuenta de que en Canarias Ahora, que no somos nosotros, ayer le daban otro poco a Doña Rita. Decían así: “hemos dado una tregua al culebrón Rita Martín, de ocupados que hemos estado con otra faceta casi tan pinturera de este Gobierno, como es la política audiovisual y dos piedras. Pero volvemos hoy a la carga porque no queremos que se nos caduquen las noticias que hemos acumulado para ustedes. Por ejemplo, ¿se acuerdan de la genial intervención en inglés de la consejera en el pleno del Parlamento del pasado miércoles? Pues sepan que se la escribió el bueno de Marc Anthony Campbell, el profesor particular de su viceconsejera y su secretario general técnico. Y no sólo eso sino que ambos se encerraron a practicar los cuatro renglones la víspera, de modo que lo poco que dijera pareciera controlado. Ya miraremos lo que ponen en la factura. Y el diario de sesiones”.
