Con toda seguridad aspirarán a la alcaldía de Arrecife tres damas de gran porte y además de buen ver. En algún caso la lucha por encabezar alguna lista será fraticida, pero todo quedara en casa.
En los otros estadios de la representación no hay luchas salvo para convencer a una del tridente a que acepte el desafío de representar a su partido-( partido, partido y por ello desigual)- en tal menester “barriletillo” está que pierde el trasero porque si logra meter a la chica a la alcaldía ella no tendrá dificultad alguna para intentar llegar al Parlamento de Canarias osease a ser madre de la patria guanche.
Claro que también pudiera surgir alguna que otra dama, en este caso “boba”, que cree que todo el monte es orégano y que sus compañeros de formación son meros lacayos a su servicio. Con esta concepción de la política la dama “boba” se puede llevar un taponazo de aquí te espero y quedar con las palancas mirando al sol.