En esta redacción, más en esta sección de la mala leche, recordamos perfectamente cuando se empezó a hablar en la Isla de la ecotasa. Entonces el actual alcalde de Arrecife, el socialista Enrique Pérez Parrilla, ejercía de presidente del Cabildo, y le llovieron unas cuantas tortas, especialmente del mundo empresarial, por defender la posibilidad de cobrar un impuesto a los turistas que luego revertería en la protección de nuestro frágil entorno. Pues bien, cuando ya parecía que estaba el tema abandonado, cuando ya se creía que este asunto había muerto, se reabre el debate, y no en Baleares, donde parece que la cosa no fue demasiado bien, ¡en Francia!, nada más y nada menos. El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy (qué bajito es este hombre aunque no lo parezca en las fotos), ha instado a la Comisión Europea a que estudie “muy rápidamente” la aplicación de un impuesto a los productos importados de países que no respeten el Protocolo de Kioto sobre reducción de emisiones causantes del “efecto invernadero”. Lo llaman “ecotasa”. “No es normal que un producto que atraviesa todo el mundo sea más caro que un producto local, porque el precio de su transporte y de su producción no integra sus emisiones de gases de efecto invernadero”, argumentó Sarkozy, que propuso que la UE debata esta cuestión en los próximos seis meses. Pues muy bien, que debatan, pero que hagan cosas. ¿Habrá alguien en Lanzarote que querrá recoger la idea y volver a hablar del asunto?
¿SE ACUERDAN DE LA ECOTASA?
9 de enero de 2008, 5:49