Dicen los expertos relacionados con el sector inmobiliario que la venta de inmuebles se está estancando y que si antes se vendían las casas en cuanto salían al mercado, ahora cuesta varios meses o incluso un año el cambio de propietario. La causa no es otra que la constante subida de los tipos de interés que está provocando que las familias estén cada vez más endeudadas y no se puedan permitir pagar las hipotecas.
Pablo González es comercial de Don Piso en Lanzarote y dice que “no diría que las ventas se están estacando pero sí que está resultando más laborioso dar salida a los pisos ya que el nivel económico de los clientes y su capacidad de compra está seriamente comprometida”.
Sin embargo, asegura que el tiempo de venta de las casas es bueno cuando su precio es el ajustado. “Lo que sucede es que la revalorización de un inmueble es mucho menor que hace un tiempo”, comenta y recuerda que hace un año una persona podía comprarse un casa y en doce meses lo había rentabilizado, pero ahora hay que ajustar el precio mucho más para poder venderlo”, explica.
Lo que está ocurriendo y así se viene destacando por parte de los representantes del sector es que muchos vendedores no se están haciendo a la idea de que ya no pueden pedir lo que les da la gana. González comenta que “no se ha producido esa reconversión en la conciencia de mucha gente y algunos se piensan que seguimos en la época de las vacas gordas en las que todo se vendía a precios desorbitados”.
Piso pequeño en Arrecife
Las principales ventas que realiza Don Piso son las de pisos pequeños en Arrecife que no superen los 120.000 euros. Y es el colectivo de inmigrantes el que conforma su grueso de la clientela, tanto en la venta como en alquileres. Y dentro de este sector, son los sudamericanos los que se están acercando a la inmobiliaria para hacerse con un inmueble. “Compran sobre todo en Arrecife y creo que es en Playa Blanca donde se está notando un receso den la ventas”, explica González.
Teniendo en cuenta que Canarias ha sido la comunidad que menor crecimiento económico ha tenido de todo el país, según el último informe de la Fundación de Cajas de Ahorros Confederadas, la crisis en el sector turístico, también se está haciendo notar en el mercado inmobiliario. Sobre esto dice el comercial que “en Arrecife no se nota tanto como pueda pasar en el sur de la Isla”, asegura.
Subida de precios en Argana
A nadie se le escapa que vivimos en un territorio limitado y que la escasez de suelo podría provocar el incremento de los precios, algo que en opinión de González está sucediendo en Argana. Dice que “allí están subiendo porcentualmente los precios”.
En cuanto a la información sobre tipos de interés o créditos con la que llegan los clientes a la agencia, Pablo González asegura que “la mayoría han oído campanas pero no saben dónde y vienen con las cosas sabidas de oídas”. Comenta que antes la gente llegaba mucho más tranquila, con el convencimiento de que el banco iba a concederles el préstamo y que ahora van pensando que todo va a ser muy complicado.
Lo que nunca terminó de cuajar en la Isla es la famosa idea de la ministra Trujillo que pretendía poner de moda los pisos de 70 metros cuadrados. Dice el comercial de Don Piso que “si para muchas cosas estamos lejos de la península, en esto muchísimo más y nadie ni se planteó algo así”.
La carencia de vivienda oficial sí que está suponiendo una ventaja para las inmobiliarias ya que los ciudadanos tienen que acogerse a las leyes del mercado.
En cuanto a la posibilidad de que los propietarios intenten vender sus inmuebles de particular a particular para evitarse la comisión de las agencias, González asegura que “todavía son muchas las personas que confían en nosotros porque aunque la gente crea que el incremento que ponen las inmobiliarias es muy alto, no es verdad y no suele dificultar la venta en comparación con las ventajas que puede proporcionar tanto a la hora de gestionar las hipotecas como en la gestión comercial en si”.
Lo que han percibido desde el sector es que los bancos sí están flexibilizando sus condiciones ya que en la guerra por conseguir clientes, tienen que ajustarse a las demandas de la población para poder hacerse con los contratos y no cree González que se esté produciendo un alto índice de morosidad en el pago de las hipotecas.
Y si el colectivo de inmigrantes está protagonizando un aumento en la compra de casas, el de peninsulares está experimentándolo en la venta ya que muchos que vinieron buscando una oportunidad laboral en Lanzarote no han visto satisfechas sus expectativas y están teniendo que regresar a sus lugares de origen. Esto también está ocurriendo, aunque todavía en menor medida, con muchos europeos que creyeron que esto era jauja y se dieron de bruces con una realidad que no era la que esperaban.
Lo que no han notado desde Don Piso es la posible competencia de Internet. Aunque cada vez son más las personas que recurren a la Red para encontrar casa, dice González que todavía el grueso de los compradores prefiere acudir a las agencias.