El objetivo del documento conjunto que elaboran España, Francia y Portugal y sus regiones ultraperiféricas (RUP) -Canarias, los departamentos de ultramar de Guayana, Guadalupe, Martinica y La Reunión, y las islas portuguesas de Azores y Madeira- con vistas a la adopción por parte del Ejecutivo comunitario de la estrategia con estas regiones, es propiciar un “cambio de paradigma” en la percepción que se tiene desde la Unión Europea (UE) respecto a estas regiones, resumió este miércoles en Bruselas el director general de relaciones con Europa del Gobierno de Canarias, Carlos Portugués.
El objetivo es “cambiar un poco esa idea” que pueden tener la Comisión Europea y algunos Estados miembros de que las regiones ultraperiféricas “son problemáticas" y "que siempre están pidiendo compensar sus dificultades”, para “pasar a otra idea que es que las RUP son una oportunidad para la Unión Europea” por razones como su “situación geográfica" y "su biodiversidad”, entre otros. Valores de utilidad a la hora de realizar estudios o buscar fórmulas para luchar contra el cambio climático, argumentó Portugués quien añadió que “en definitiva se trata de hacer valer a la Comisión” Europea el “cambio de paradigma, es decir, pasar de unas regiones con una serie de problemas a unas regiones que dan valor añadido” al club comunitario.
Carlos Portugués participó en un encuentro con miembros de la Representación Permanente (Reper) de Francia ante la UE, del Ministerio de Ultramar galo, de distintos ministerios portugueses y del Ministerio de Exteriores español, para avanzar en los trabajos de elaboración de este documento que aún se encuentra en un “estado embrionario”.
La participación directa de Canarias en estas reuniones está siendo posible gracias al “buen entendimiento” que existe respecto a esta cuestión entre los Gobiernos Autonómico y Central, resaltó el director general de Relaciones con Europea.
Desde el 9 de junio, cuando los tres socios europeos y sus regiones ultraperiféricas decidieron presentar este documento en una reunión celebrada en París, en la que también estuvo representada la Comisión Europea, se han celebrado otros dos encuentros. Una próxima cita podría producirse en torno al 21 de julio para concretar más este texto conjunto que debería llegar a las mesas del Ejecutivo comunitario el 25 del mismo mes.