La consejera de Agricultura del Cabildo, Nereida Pérez, dijo este martes en el programa “El Despertador” de la 95.8 que se reunirá el próximo 17 de septiembre en Tenerife con su homóloga en el Gobierno canario, Pilar Merino, para definir las subvenciones por las pérdidas de uva de este año, que ascienden a más de 1 millón de kilogramos.
El próximo 17 de septiembre la isla picuda acogerá el Consejo de la Viña y el Vino, en el que estarán presentes los miembros más representativos de los consejos reguladores de Canarias a excepción de Fuerteventura, los consejeros de Agricultura de las siete islas y el director del Instituto Canario de Calidad Agroalimentario.
El objetivo esta vez no es únicamente valorar estrategias de comercialización o de promoción sino tratar las incidencias de la vendimia, en el sentido de buscar una compensación a las pérdidas de renta e ingresos de los agricultores isleños en general y los lanzaroteños en particular teniendo en cuenta que el Gobierno también debe hacer frente a las ayudas para los que lo han perdido todo en los incendios.
Según explicó, desde el Consejo Regulador lanzaroteño se trasladó en su momento al Gobierno autonómico un dato comparativo de las dos últimas vendimias junto con la presente correspondiente a los años 2005, 2006 y 2007, por lo que tanto Merino como el director del Instituto Canario de Calidad Agroalimentario ya saben a qué pérdidas se enfrentan al llegar a dicha reunión.
Una de las islas con más pérdidas, La Palma, les trasladará los daños que afectan a sus agricultores (hasta un 90 por ciento en algunas variedades) y así lo harán el resto de representantes de las islas presentes en el encuentro. “Como se ve, es algo generalizado; a ver si con este apoyo subvencionan en algo ese millón de kilogramos que hemos perdido”, manifestó.
Según explicó posteriormente a Crónicas, confía en la “sensibilidad” de los máximos responsables del sector agrícola en Canarias ya que “no es algo puntual sino generalizado”.
Aunque la vendimia finalizará el próximo fin de semana con la recogida de la uva tinta y los último coletazos de la blanca malvasía además de lo que quede del listán blanco -este año termina la vendimia un mes antes ya que la pasada temporada lo hizo el 27 de septiembre- ya se sabe que se obtendrán alrededor de 1,6 millones de kilogramos de uva.