Fotos: Jose Curbelo
Bodegas Mozaga presentó este miércoles en las instalaciones del hotel Los Fariones de Puerto del Carmen su nueva imagen y productos. La bodega, adscrita a la Denominación de Origen Vinos de Lanzarote, descubrió una imagen rompedora y su nuevo vino “Teiga”, novedades con las que afronta la nueva etapa derivada del cambio de propiedad.
El acto, que se llevó a cabo ante numerosos distribuidores y comercializadores de vino procedentes de Tenerife, contó con las intervenciones del consejero delegado de la empresa, Miguel Martín, el consejero de Turismo del Gobierno de Canarias, Manuel Fajardo Feo, la enóloga de la empresa, Ángeles Matallana, el prestigioso sumillier Mario Reyes, y el responsable de Comunicación de la Bodega, Pablo Rodríguez.
Fajardo Feo alabó el carácter “arriesgado” e “innovador” de la emblemática empresa lanzaroteña, de la cual estimó además que había “marcado tendencias”.
Por su parte, Miguel Martín recordó que su relación con la viticultura se comenzó a gestar desde pequeño e hizo referencia a la necesidad de cuidar entre todos el paisaje del que parte la uva.
Aires de renovación
Desde el pasado mes de julio, Bodegas Mozaga ha emprendido un importante proceso de renovación, fruto del cambio de propiedad en gran parte da las acciones de la empresa titular, Montaña Clara SA, constituida en 1974 con el fin de hacer frente a la generalización de las prácticas fraudulentas derivadas de la entonces habitual venta de vino a granel.
Como consecuencia de este proceso de cambio experimentado, Bodegas Mozaga ha sufrido un notable impulso que permitirá ampliar la dotación tecnológica de la bodega para superar la capacidad de 700.000 litros actuales. Pero además, las novedades se han trasladado al ámbito de la comercialización, siendo conscientes de que en un mercado tan competitivo y con la dificultad añadida de la insularidad, es necesario optar por estrategias de marketing que permitan diferenciar un producto en el mercado y hacerlo atractivo a un consumidor cada vez más exigente.
A la calidad en los procesos de elaboración de la que ya hace gala Bodegas Mozaga, y que le ha valido la obtención de numerosos galardones, se une ahora un diseño más actual, rompedor y atractivo, que permitirá dotar a los productos de la bodega de una imagen más acorde con las tendencias actuales en el ámbito del marketing y la comunicación de vinos.
Las actuaciones se resumen en una apuesta por la renovación fundamentadas en aumentar la calidad, refrescar la imagen asociada a la ésta, ampliar referencias, crear una nueva gama de vinos de alta expresión para restauración, ampliar y mejorar la bodega y la relación con los clientes partiendo de la premisa de la comunicación como algo básico y situarse en la vanguardia de los vinos de Canarias.
Ángeles Matallana explicó durante su intervención que se trata de “conjugar lo moderno y lo antiguo, la solera con la tecnología punta”.
Una nueva criatura con nombre de mujer: Teiga
A los vinos de Mozaga se une ahora una nueva criatura con nombre de mujer: Teiga, como reflejo de la femineidad. Se trata de un malvasía seco fermentado en barrica que, para Bodegas Mozaga, es símbolo de juventud y frescura, adjetivos que resultan de toda renovación. Se trata de un vino monovarietal de malvasía, elaborado tras una buena selección de los racimos que son cultivados entre cenizas volcánicas, según el método tradicional de Lanzarote.
La fermentación en barrica nueva de roble americano y francés y el posterior proceso de “batonnage”, que consiste en remover las lías para que éstas queden en suspensión, confieren a este vino un gran potencial aromático, complejidad y personalidad, características que se unen a la elegancia de su presentación.
Como broche de oro, durante el acto de este miércoles la empresa mostró la “joya de la casa”, el Moscatel de 1975, considerado este año “el mejor vino de licor de Canarias”, entre otros premios de relevancia.
Se trata de un vino que se elaboró en 1975 con uva moscatel al 100% y que estuvo durante 20 años en barricas de roble americano.
Bodegas Mozaga, por tanto, mira con optimismo al futuro pero sin olvidar la experiencia y trayectoria que les ha permitido situar sus vinos al más alto nivel y contar con la confianza de los consumidores.