Los alcaldes de la mayoría de municipios de Lanzarote -todos menos Tías- estiman que el Plan Territorial Especial de Ordenación Turística, encargado por el Cabildo al grupo que coordina el arquitecto urbanista Fernando Prats, se ha convertido en una especie de ‘caja negra' de la que poco o nada conocen. Con excepción del primer edil de Tías, los mandatarios locales demandan mayor información del Cabildo y exigen consenso antes de su aprobación. El documento tiene por objeto establecer previsiones específicas de desarrollo territorial y turístico conforme a las Directrices de Ordenación del Turismo de Canarias.
Aunque los municipios no turísticos reconocen que Yaiza, Tías y Teguise tienen mucho que opinar sobre el texto, San Bartolomé, Haría y Tinajo creen que todos los ayuntamientos deben recibir, por simple cortesía institucional, completa información. José Francisco Reyes, alcalde de Yaiza, que además sin tapujos señala a Fernando Prats como la persona menos indicada para adelantar este trabajo, dijo en Lanzarote Radio que su concejal de Urbanismo sólo ha asistido a una reunión, y extraña además que siendo Yaiza un municipio turístico ni siquiera se hayan pedido datos al Ayuntamiento. Reyes cree que las sugerencias del Cabildo son tan valiosas como la opinión que pueda emitir cualquiera de las corporaciones locales.
Domingo Cejas, titular de Urbanismo de Teguise, apuesta igualmente por un documento de absoluto consenso en el que sea notaria la participación y colaboración mutua. Según afirmó, hace más de un mes que no tienen la menor idea de la situación del Plan. A los alcaldes de Tinajo y Haría, Jesús Machín y José Torres Stinga, respectivamente, les preocupa la desinformación, pero mucho más que los representantes de Yaiza y Teguise la acusen. Ambos ediles se declaran ajenos al contenido del documento. En todo caso, confían en la palabra de la máxima responsable del Cabildo, Inés Rojas, quien ha manifestado que sin consenso no se aprobará, pero cuestionan la ausencia de comunicación y temen por un visto bueno a toda prisa. Por su parte, el alcalde de Tías, José Juan Cruz Saavedra, admite que al menos en tres oportunidades se ha reunido con Prats y el consejero de Política Territorial, Carlos Espino, a quienes ha expuesto dos necesidades básicas: renovación de la planta alojativa del núcleo turístico de Puerto del Carmen y la diversificación de la oferta de ocio.
“No es razonable”
Así tachó el alcalde de Haría el proceso de redacción del Plan Territorial. Torres Stinga aseguró que lo lógico habría sido debatir el documento en los plenos de todos los ayuntamientos y luego proponer su aprobación en el Pleno cabildicio. Los ayuntamientos reconocen que esta situación ha creado un clima de desconfianza. “No hay un criterio unificado. Tenemos que tener una reunión en donde todos pongamos sobre la mesa lo que pretendemos”, anotó Domingo Cejas. Para los alcaldes, Prats podrá plantear el modelo de Isla que debe ser Lanzarote, pero recuerdan que son ellos, como responsables políticos, los que marcan las pautas a fin de que el equipo redactor desarrolle su trabajo. “No sé si Prats ha ido alguna vez a comer a Playa Blanca. Yo nunca lo he visto en mi municipio. Me imagino que como él entiende mucho de planos no le hace falta ir”, comentó irónicamente el alcalde de Yaiza. Reyes dijo tener alguna esperanza por la promesa de consenso que hiciera Inés Rojas, pero considerando ese matiz no entiende unas declaraciones de Carlos Espino que, según el alcalde de Yaiza, afirmó hace un mes “que en cualquier momento se aprobaría el Plan”.
Otro de los sorprendidos es el alcalde de San Bartolomé, Miguel Martín, quien también reclamó mayor información, así el municipio que representa no sea turístico. Ante todas estas declaraciones, el consejero de Política Territorial explicó que ha sido voluntad del actual grupo de gobierno mantener informados a los ayuntamientos, y como prueba citó el Consejo de la Reserva de la Biosfera, en donde se ha debatido el Plan Territorial en presencia de todos.
Más allá del Plan
La reflexión de los alcaldes supera la frontera del Plan Territorial Especial. Torres Stinga pide un compromiso claro de todas las fuerzas políticas para armonizar el modelo de Isla que se quiere. Sea cual sea el documento, insistió, el consenso debe aflorar, ya que se corre el riesgo de cambiar los lineamientos cada vez que haya cambio de grupo de gobierno. Jesús Machín, sin entrar a nombrar los partidos o las personas que ostentaban el poder en el año 91, advirtió de que no se pueden cometer los mismos errores del pasado. “Lo del Plan Territorial es preocupante porque recuerdo que el PIOT se aprobó prácticamente en un cajón y sin que nadie se enterara”. El alcalde de Tinajo abogó por sentar las bases de una verdadera planificación territorial y turística. Machín augura que de ese trabajó dependerá la calidad del turismo que nos visite y por consiguiente la movilidad económica de Lanzarote. Destaca entre sus demandas la vinculación del deporte al turismo. Un claro ejemplo son los altos niveles de ocupación y la promoción que representa para la Isla la celebración del Ironman Lanzarote.
El debate sobre el Plan Territorial puso sobre la mesa la solicitud unánime que hacen los alcaldes para tener en sus municipios una zona industrial que, por un lado, mejore el servicio que prestan los comercios y que, por otro, descongestione los núcleos urbanos de las distintas actividades productivas.