sábado. 10.05.2025

La presidenta de Cáritas Lanzarote, Lola Villalba, está inmersa en la campaña que estos días se está dirigiendo a las personas sin techo. No obstante, saca tiempo para coordinar el comedor de la organización, que ha visto duplicada su afluencia; la casa de acogida, que también tiene lista de espera y el recibimiento y orientación de toda la gente que se dirige a sus instalaciones buscando ayuda.

Este miércoles habló en el programa Así son las Cosas de Crónicas Radio de uno de sus principales objetivos, el albergue para la gente que no tiene donde dormir, o el espacio que tendrán en el centro sociocultural de Altavista para desarrollar algunas de sus actividades solidarias.

- Cáritas Lanzarote está inmersa en una campaña dirigida a personas sin hogar. ¿Han notado un incremento importante de de este sector en la isla?

- Sí. En los últimos seis meses se ha notado el aumento de personas y la diversidad de las mismas.

- ¿Ha cambiado mucho el perfil de estas personas?

- Ha cambiado muchísimo. Antes teníamos personas con edades superiores a cincuenta años y ahora hay gente con veinte años que llegan para ser atendidos y orientados.

- ¿Ya no sólo llega gente con problemas de adicciones o en una situación de indigencia?

- Es un perfil nuevo y complejo. Es gente que ha trabajado en el sector de la hostelería y la construcción que han visto la bajada en el sector y que se han quedado sin empleo y a la intemperie. Son personas que no tienen familia en la isla. Hay que tener en cuenta que ahora la familia es la principal ONG porque son los que están recogiendo a aquellos que se han quedado en una situación desamparada.

- ¿Es toda gente de fuera o también hay personas de Lanzarote?

- Es sobre todo gente de fuera aunque también hay alguno de la isla. Son personas que llegaron a Lanzarote, que han estado trabajando pero que ahora ya no tienen empleo y ven que la cosa no mejora.

- ¿Cáritas es para ellos la solución a una situación desesperada?

- Cáritas tiene un espacio de atención a las personas. No sólo está el comedor. Primero se hace un estudio de la persona. Hay que acogerles, escucharles y darles toda la orientación que podemos. En la medida en que la persona se siente atendida, se encuentra más relajada. Lo que pasa es que muchas veces vemos a veinte personas diarias y uno tiene el espacio que tiene.

- ¿Qué cuentan cuando llegan?

- Que han perdido el trabajo, que se les ha acabado la prestación y que están ya con los últimos recursos. Algunas personas pueden asistir a la casa de acogida pero ahora mismo hay lista de espera. También están los usuarios del comedor.

- ¿Cuántas plazas tiene la casa de acogida?

- Dieciséis plazas, once de ellas para varones.

- ¿Cómo se determina quién va a hacer uso de ella y durante cuanto tiempo?

- Hay gente que por sus circunstancias puede estar seis meses o llegar a un año. Es el tiempo que tarda en reincorporarse a la sociedad. Otras personas pueden estar dos meses o uno y hay gente que tiene que volver.

- ¿Qué requisitos deben cumplir?

- Lo que nosotros intentamos es acogerles pero ellos deben hacer un trabajo de reinserción, incluso con ellos mismos como personas y con la gente con la que viven. Deben volver a la sociedad y nosotros intentamos que el ser humano se sienta así, ser humano.

- ¿Llegan a la casa de acogida porque acuden a Cáritas voluntariamente o derivados de Servicios Sociales?

- Las dos cosas. Todo está coordinado. Hay muchas personas que no conocen Cáritas. Por eso es importante el trabajo de la acogida.

- ¿Qué posibilidades reales hay de que esas personas encuentren un trabajo, tal y como está el mercado laboral?

- Nos sorprende pero hay algunos que se van colocando.

- ¿Hay empresas que sean especialmente sensibles con la situación de los acogidos por Cáritas y que recurran a ellos cuando necesitan personal?

- En esa línea no tenemos una bolsa de trabajo. Lo que sí tenemos es ayudas por parte de las empresas. La gente que vive en la casa tiene que ducharse, comer y todo lo imprescindible para vivir. Hay empresas que ofrecen ayudas en ese sentido pero sería ideal que hubiera empresarios que pudieran contratar a esta gente porque son personas cualificadas para desempeñar determinados puestos de trabajo.

- Habla de que hay lista de espera para entrar. ¿Dónde viven aquellas personas que lo han solicitado y que se supone que están faltas de recursos?

- No tengo el dato porque lo lleva la trabajadora social. Normalmente, suelen quedarse en casas de amigos.

- ¿Hay mucha gente durmiendo en la calle en Arrecife?

- Ese es uno de nuestros objetivos pendientes. Tendríamos que plantearnos ya un albergue para que la gente no duerma en la calle.

- ¿Está planteado este tema?

- Sí. Se ha planteado y se ha pedido pero hasta ahora no ha habido respuesta. Hay que hacer una apuesta por sentarse y dejar claro que el albergue es un espacio necesario. En otras comunidades se tiene un albergue para que la gente pueda dormir y en esta isla es necesario.

- ¿El comedor también ha notado mucho incremento de usuarios?

- El comedor está pensado para 30 personas pero lo hemos visto doblado y hemos tenido que poner dos turnos. La comida que nos aportan los hoteles es algo muy generoso y la gente está pudiendo comer.

- ¿Atienden también niños?

- No, sólo a adultos. Los departamentos de Asuntos Sociales de los ayuntamientos son los que se ocupan de las familias.

- Al margen de las aportaciones de los hoteles, necesitan dinero en efectivo. ¿De dónde lo sacan?

- Tenemos aportaciones del Gobierno de Canarias, Cabildo, Ayuntamientos y donaciones de particulares. Es la forma de sostenernos porque tenemos nueve trabajadores.

- ¿Han notado también los recortes, como otras organizaciones y asociaciones?

- No. Somos unos privilegiados en ese sentido. Sí que es verdad que lo que hacemos cada día es ajustarnos y reinventarnos. Tenemos que ajustarnos muchísimo pero afortunadamente, llegamos.

- Una buena parte de las actividades que van a llevar a cabo será en el Centro sociocultural de Altavista. Precisamente, muchos vecinos se han quejado de que el párroco de este barrio les ha quitado el espacio donde estaban llevando a cabo su trabajo solidario. ¿Qué ha pasado?

- No creo que yo sea la persona adecuada para dar respuesta. Es un tema sensible pero sí quiero dejar claro que vamos a tener un espacio en el centro sociocultural de Altavista.

“Es necesario un albergue en Arrecife”