La Fundación César Manrique (FCM) cumplió este martes sus primeros quince años de vida, más de una década y media dedicada a difundir al mundo el mensaje del genial e irrepetible artista que un 27 de marzo de 1992 vio completado uno de sus grandes sueños. Todos los que apreciamos la ingente labor que ha realizado la institución que preside con mano diestra José Juan Ramírez estamos de enhorabuena. En este diario también, por supuesto, porque valoramos y apreciamos lo que significa en estos momentos la Fundación, lo que ha significado en los últimos quince años.
Estamos convencidos de que César mirará desde el cielo todo lo que se hace, celoso como era de su trabajo y de la meticulosidad de su método, que no era otro que el de luchar por una tierra única y singular como era la suya, Lanzarote.
Durante este periodo la Fundación ha sido capaz de salir adelante a pesar de las muchas trabas que le han impuesto y a pesar sobre todo de los numerosos golpes que le han dado por intentar defender la verdad, su verdad, por intentar sobre todo hacer que permanezca y prevalezca el indomable espíritu de su fundador, quien luchó como luchan ahora sus sucesores para proteger a Lanzarote de los muchos ataques externos e internos que sufre. Lo ha hecho además con el mérito que tiene el autofinanciarse, el no depender económicamente de nadie, de ninguna institución pública, de nadie que le ordene hacia dónde tienen que ir sus tiros.
La Fundación César Manrique se ha convertido en un referente cultural, social y de pensamiento en todo el mundo. Su éxito ha traspasado nuestras fronteras, y cuenta entre sus asiduos con gente del prestigio del Premio Nóbel José Saramago, un admirado y querido hijo adoptivo también de esta tierra de volcanes.
Durante estos días previos este diario ha ido ofreciendo diferentes informaciones vinculadas con esta importante celebración, tanto con declaraciones de su presidente, José Juan Ramírez, quien no termina de creerse la consolidación que ha tenido el proyecto en este tiempo, como de su director de Actividades Fundacionales, Fernando Gómez Aguilera, que sigue aspirando a que la institución tenga un papel preponderante en la lucha por la conservación del frágil territorio que Manrique quiso que se conservara como lo habían previsto sus ancestros.
La Fundación en este tiempo ha ido creciendo. De hecho, recientemente estrenó nueva página web, una herramienta ya consolidada pero renovada con la que la institución busca acercar la obra César Manrique a los ciudadanos y al mismo tiempo difundir la programación que organiza.
Fue un 27 de marzo de 1992, unos meses antes del fatal desenlace de la vida y obra de César. Han pasado quince años, quince años durante los cuales la institución no sólo se ha consolidado como máximo organismo defensor de la obra del genial artista lanzaroteño sino que además ha sido impulsora y referente de numerosos colectivos sociales en la lucha por la defensa del territorio isleño. En este periodo de actividad incesante “ha habido de todo”, tal como apuntaba recientemente Fernando Gómez Aguilera, otra de las piernas en la que se sustenta la institución.
Estamos de enhorabuena, y lo estamos con el deseo sincero de que esos quince años no sean más que el principio de una larga y provechosa vida, por el bien de esta sociedad, por el bien de Lanzarote.