Seis menores inmigrantes resultaron heridos este martes, cinco de carácter leve, dados ya de alta, y un sexto de carácter reservado, debido a unos cortes que se produjo al ayudar en las labores de extinción del fuego, en un incendio que se tuvo lugar este lunes por la noche alrededor de las 24:30 horas, en el dispositivo de emergencia para la atención de menores extranjeros no acompañados de Tegueste, en Tenerife.
El incendio, cuyas causas se desconocen y que se encuentran en fase de investigación por parte de las autoridades policiales, tuvo lugar en uno de los dormitorios de la planta baja del edificio, donde dormían seis chicos.
Al darse la alarma del fuego, se desalojó de forma inmediata las habitaciones, tanto de la planta baja como de la alta, y se procedió a controlarlo mediante el uso de extintores, hasta que llegó la unidad de bomberos quien se hizo cargo de las últimas labores de extinción del fuego.
En la salida de los chicos, dos de ellos sufrieron algunas torceduras y otro sufrió una leve quemadura en el costado. Estos menores fueron trasladados al Hospital Universitario de Canarias para su reconocimiento médico, al igual que otros tres chicos por inhalación de humos. Todos ellos han regresado ya el centro y se han reincorporado a sus actividades diarias con normalidad.
Por otro lado, otro joven quedó ingresado en el hospital al sufrir varios cortes en los dedos de las manos, cortes que se produjo al ayudar en las labores de extinción al pasar una manguera a través de un cristal.
El incendio, que tuvo lugar en una de las habitaciones de la planta baja, no afectó a la estructura del inmueble.
El técnico de coordinación de Bomberos de Tenerife alertó del suceso y hasta el lugar se desplazaron efectivos de los parques de La Laguna y Tegueste, que comprobaron como un dormitorio estaba ardiendo y que el humo generado afectaba al 60 por ciento del edificio, que ya había sido desalojado.
Con el apoyo de tres equipos de respiración autónoma, se montó un tendido de mangueras de 25 metros y se procedió a la total extinción de las llamas utilizando unos trescientos litros de agua, informan los bomberos. Posteriormente, se aireó el recinto con la ayuda de un ventilador de presión positiva.