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La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Las Palmas ha condenado a diez años de prisión a Eulogio José Ramón Bernal, como autor responsable de un delito de asesinato en grado de tentativa, con su pareja como víctima.
Según argumenta la sentencia, el condenado disparó a su esposa, irlandesa de 25 años de edad, en el domicilio compartido de Tinajo, sufriendo la mujer heridas de consideración de las que aún padece secuelas.
El Ministerio Fiscal, por su parte, había solicitado la pena de 14 años para el acusado, pero la Audiencia Provincial ha estimado el atenuante de embriaguez, alegado por la defensa, cuando se produjeron los hechos, en el mes de mayo de 2009.
Según la sentencia, queda demostrado el vecino de Tinajo Eulogio José R.B., de 46 años, volvía en la noche del 27 de mayo de 2009, de ver un partido en el teleclub con su mujer y el hijo de ambos, de seis meses, cogió del armario la escopeta para la que tenía licencia como cazador y le pegó dos tiros de perdigones a su mujer.
El acusado dijo este miércoles ante la Audiencia Provincial de Las Palmas, durante la vista oral, que no recodaba casi nada de la noche en la que supuestamente le descerrajó dos tiros –uno en la barriga y otro en la espalda– a su mujer, una irlandesa de 25 años que quedó marcada de por vida y que compareció aterrorizada para afirmar que ella sí que se acordaba.
Lo que aseveró es que había bebido tanto que no recordaba nada. Sin embargo, sí negó que poco antes de disparar le hubiera dicho a ella, que "aquí se hace lo que yo digo". Alegó que no era machista. Ante tal aseveración, la fiscal le recordó que su anterior pareja ya le había denunciado por amenazas.
La esposa del acusado compareció a declarar literalmente aterrorizada –sus padres, desde las bancadas, intentaban tranquilizarla sin éxito– y mediante su relato evidenció que tenía motivos para estarlo: "El primer disparo me dio en el brazo y en la barriga, y el segundo en la espalda, me caí al suelo con las tripas saliéndose, y cuando estaba intentando volvérmelas a meter"; detalló a través de un intérprete, "se puso encima mía y volvió a apuntarme, al tiempo que me decía ni Dios te va a sacar de casa".
La presunta víctima añadió que, en semejante situación, le imploró: Por favor, mira como estoy, no dispares más"; y él, dijo, "giró la escopeta y se apuntó a la cara". Agregó que "por poco" los perdigones no alcanzaron al niño.
Además de la condena a prisión, a Eulogio José Ramón Bernal se le prohíbe acercarse a menos de 500 metros de la víctima y del hijo, por espacio de quince años. Asimismo, tendrá que hacer frente al pago de una indemnización de 5.470 euros en concepto de compensación, por las lesiones originales; así como de 3.000 euros, por las secuelas.