ACN
Más de 200 inmigrantes ilegales fueron expulsados hacia las fronteras de Argelia en los últimos días, mientras que se levantan voces que piden a las autoridades marroquíes no implicarse mucho en la lucha contra la inmigración ilegal.
En este marco, las autoridades subrayaron este jueves que más de 200 inmigrantes fueron detenidos desde principio del mes de abril hasta el lunes. La mayoría son subsaharianos y fueron detenidos justamente en la provincia de Oujda, cercana a las fronteras argelinas, aunque también había inmigrantes de otras nacionalidades asiáticas.
Los inmigrantes fueron directamente expulsados hacia las fronteras argelinas, por donde habían entrado. Hay que señalar que Marruecos tiene a lo largo de las fronteras con Argelia soldados y decenas de patrullas en un intento de frenar la entrada de los ilegales.
Por otra parte, el periódico L'Economiste escribió en su editorial de este jueves que Marruecos está entre dos presiones: la de Europa, que quiere convertirle en gendarme de sus fronteras del sur, y la de los inmigrantes subsaharianos, que quieren llegar al territorio europeo a través las tierras marroquíes.
El periódico pide a Rabat que reconsidere su política en inmigración, ya que debe exigir a la UE que las fronteras sur no terminan en El Estrecho, sino directamente en el sur de Marruecos y que la UE debe contribuir a la vigilancia de las fronteras del país.