El diputado nacional de Nueva Canarias (NC) por la provincia de Las Palmas, Pedro Quevedo, se ha mostrado atónito cuando este miércoles le han preguntado en el programa “A buena hora” de Crónicas Radio-COPE Lanzarote sobre la polémica que se ha generado a la hora de ubicar después de muchos años de retraso los aparatos del nuevo Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE). El veterano político no entiende que en el Ministerio del Interior hayan sido capaces de destrozar parte del mirador de Guinate sin darse cuenta del valor que tiene para la isla de Lanzarote, como no entiende la pasividad de las autoridades locales a la hora de reaccionar antes de que se produjera el destrozo.
“Esto es el ejemplo perfecto de por qué tiene que haber alguien en Madrid con un ojo mirando al Archipiélago y otro hacia todos los ministerios para ver qué hacen. ¿Pero cómo se puede haber producido algo así, qué mentecato o mentecata del Ministerio ha hecho esto, qué burro o burra no conoce la realidad canaria y determinó que se podía hacer un boquete justo en medio de un lugar que forma parte del patrimonio de la isla de Lanzarote como es el mirador de Guinate?”, se preguntó visiblemente molesto durante su intervención. “¿A qué animal, a qué burro se le ha ocurrido hacer esto?”, insistió. “La otra parte es preguntar por qué han tardado tanto en reaccionar en las autoridades locales, por qué no ha hecho nada antes el Ayuntamiento”, añadió.
Quevedo tiene claro que se va a dar marcha atrás, entre otras cosas por la presión que ya se ha ejercido en Madrid sobre el asunto del SIVE. “Esto se va a corregir, ya hemos formulado la correspondiente pregunta, he hablado con el portavoz del PSOE del asunto y le he dicho que no se pueden cometer estos errores. Hay que hablar más porque estas cosas nos ofenden. Me asombra sinceramente lo que ha sucedido”, remarcó. “Llevamos ocho años exigiendo que se ponga el SIVE y ahora se cargan parte del patrimonio de Lanzarote, es inadmisible”, sentenció por último.
Nota de NC
Posteriormente, sus compañeros en Lanzarote enviaron una nota de prensa a este diario en la que reiteran su posicionamiento en contra de la decisión unilateral del Ministerio del Interior. El secretario de Pacto Verde, Armando Santana, considera “inentendible cómo el Gobierno de España ha decidido ubicar el SIVE en el mirador de Guinate”. “A nadie se le hubiese ocurrido destruir un mirador como el Templo de Debod en Madrid colocando una infraestructura militar. ¿Por qué sí en Canarias?”, se pregunta.
Los canaristas no cuestionan que el SIVE deba ser instalado cuanto antes con el fin de mejorar la detección y rescate de las embarcaciones que mantienen como destino las costas canarias. “Es una cuestión de respeto a la toma de decisiones que nos afectan como pueblo y sociedad, más cuando estamos tratando de parajes con un valor identitario y paisajístico tan importante”, esgrime Santana, que ve una vulneración de las competencias del autogobierno canario recogidas en los artículos 153 y 154 del Estatuto de Autonomía referidas al medio ambiente y los espacios naturales.
Por su parte, el Comité Local en Haría hace corresponsable de tal situación al Ayuntamiento norteño por su falta de respuesta y alternativa. Marcos Lemes, portavoz local, señala en la nota que “el grupo de gobierno de Haría está paralizado y sin respuestas a las contingencias que surgen en la gestión pública”, un síntoma, por otra parte, “de la desidia y la falta de cohesión interna de los partidos que conforman el pacto de gobierno, CC y PMH”.
Lemes prosigue argumentando que “existen alternativas que no alteran el paisaje ni los elementos identitaros de Lanzarote, como es el mismo recinto militar de las Peñas del Chache”.
Así las cosas, NC dice que ha elevado la protesta y sus exigencias al Congreso de los Diputados a través del congresista Pedro Quevedo. Quevedo ha formulado dos preguntas al ministro Fernando Grande-Marlaska para que le explique el procedimiento empleado para ubicar el SIVE y si para ello es “necesario liquidar una parte del patrimonio” insular. Una situación, censuró, que ha generado una “alarma y malestar extraordinario” entre la ciudadanía.
