miércoles. 24.04.2024

"El problema es que no todos los médicos del Gobierno trabajan para nosotros. El médico que falta aquí no depende del Servicio Canario de Salud; depende de la Consejería de Bienestar Social. Nosotros no hacemos valoraciones para dependencia"

"Contratar gente en Lanzarote siempre es difícil pero esta semana hemos hecho un borrador del balance de gestión y desde el comienzo de la legislatura hemos tenido un total de 554 profesionales nuevos"

El gerente del Hospital Doctor José Molina Orosa y de los Servicios Sanitarios de Lanzarote, José Luis Aparicio, asegura que no hay motivos para pensar que la viruela del mono vaya a convertirse en pandemia pero comprende el miedo en el cuerpo que hay entre la población después de los dos años que hemos vivido con el covid. En el programa “A Buena Hora” de Crónicas Radio – Cadena Cope de este jueves aseguró que si la contratación de un médico para que evalúe la Dependencia en Lanzarote dependiera de su Gerencia o del Servicio Canario de Salud, ya estaría contratado. El problema es que depende de la Consejería de Bienestar del Gobierno de Canarias y son ellos, un departamento que lleva directamente Podemos, quienes deben aportar el recurso. También ha criticado otra decisión derivada de la gestión política del grupo Podemos, la aplicación en Canarias de la nueva Ley del Aborto, que según la parlamentaria María del Río, acabará con la discriminación que sufren las mujeres en islas como Lanzarote y podrán interrumpir su embarazo sin tener que viajar a Las Palmas. Aparicio dice que una decisión así se ha tomado sin consultar al ámbito médico; de hecho, 9 de los 13 médicos que podrían hacer el proceso en Lanzarote son objetores de conciencia y habría que buscar un centro concertado que lo llevase a cabo; pero lo que es peor, no han consultado a las afectadas porque asegura que sin conocer una estadística oficial se puede deducir que más de la mitad de las mujeres lanzaroteñas seguramente prefieren abortar fuera de la Isla para garantizarse mejor el anonimato y la privacidad en un momento que no es precisamente agradable.

- ¿Ya está más tranquilos, después de estos dos años tan intensos?

- Tranquilidad relativa. Es cierto que, aunque todavía quedan algunos coletazos, el tema del covid ya está prácticamente solucionado. Lo que pasa es que siempre van surgiendo problemas; ahora está lo de la viruela del mono y cuando el covid nos deja hacer cosas más normales, estamos apretando el acelerador para todos esos proyectos que se habían quedado traspapelados. Hay muchas cosas que ya había que mejorar antes del covid y que siguen igual.

- Ahora que ya no se usa la mascarilla, han vuelto los resfriados y catarros de toda la vida…

- Efectivamente. Durante los dos años del covid había enfermedades que antes eran frecuentes en invierno como la gripe y otros virus respiratorios que desaparecieron porque el mecanismo de transmisión era el mismo que el del covid. Al ponernos la mascarilla por el covid, de rebote, evitamos también este tipo de transmisiones de esos otros virus. Ahora han reaparecido.

- ¿Sigue habiendo gente ingresada con covid en el Hospital?

- Sí. Hay gente que tiene infecciones pero son muy leves. Nos pasa que ingresan personas en el hospital por otro motivo, para un parto o una apendicitis y cuando les hacemos el test, antes de ingresar, dan positivo. Son pacientes que ingresan en el hospital con covid pero no por covid. Lo que pasa es que tenemos que ubicarles en un sitio específico y aparecen en las estadísticas. Eso supone que consuman recursos específicos pero lo dicho, la mayor parte ingresan con covid pero no por covid.

- De hecho, a veces pasaba cuando se informaba de un fallecimiento con covid, no tenía por qué ser por covid…

- Eso es. Además, cuando fallecían en casa, por ejemplo, nos recomendaban no hacer autopsias y en ese momento, sobre todo cuando no había vacunas, en el punto más álgido de la infección, teníamos que apuntar cuándo eran positivos. Seguramente hubo pacientes que tenían covid que fallecieron por otro motivo pero solo pudimos demostrar ese covid por no haber podido hacer la autopsia correspondiente.

- ¿Va a haber una próxima vacuna?

- A fecha de hoy, no tengo información sobre más vacunas. Sí que hay alguna población de riesgo, el grupo 7, que son los inmunodeprimidos que tienen una dosis más que el resto de la población. En cualquier caso, si hubiera que hacerse, se haría porque hemos demostrado que tenemos capacidad para ello.

- ¿Hay que preocuparse por la viruela del mono?

- Ha llegado en un momento muy delicado porque tenemos muy reciente el covid y es lógico que la gente se asuste pero es bastante diferente del covid. Sería muy improbable, aunque no imposible, que resultara tan grave como el covid porque la forma de transmisión no es tan contagiosa como el covid. Para que una infección se convierta en pandemia tiene que ser muy transmisible. Recordarán que en los momentos complicados del covid, los rastreadores sacaban de un caso clínico 10 o 12 contagios y de cada uno de esos 10, salían otros 10, con lo que en dos días pasábamos de 1 a 100 pacientes. La transmisibilidad en la viruela del mono requiere un contacto mucho más estrecho y hay quien lo llama contacto íntimo, lo que pasa que contacto íntimo suena a otra cosa. Tienes que estar en contacto piel con piel con alguien que tenga erupciones cutáneas virulentas o muy de cerca de alguien que pueda llegar a contagiártelo por la saliva. En cualquier caso, mucha gente ya está vacunada antes de empezar el problema. Por ejemplo, yo tengo la vacuna de la viruela. Soy de las últimas generaciones a las que se las pusieron. La vacuna de la viruela humana protege al 80% frente a este virus porque se parece mucho. Si hiciera falta, ya tenemos experiencia con el autocovid o con campañas grandes de vacunación.

- ¿Ha habido algún caso en Lanzarote o se está estudiando a alguien?

- No. Hay 3 en Tenerife y 1 en Gran Canaria, creo, son datos que no tengo presentes.

- En Lanzarote falta un médico que haga las evaluaciones para que la gente dependiente pueda acceder a las ayudas. ¿Tienen en la Gerencia alguna información sobre este asunto?, ¿se podría resolver, aunque fuera trayendo a algún médico de forma interina?

- El problema es que no todos los médicos del Gobierno trabajan para nosotros. El médico que falta aquí no depende del Servicio Canario de Salud; depende de la Consejería de Bienestar Social. Nosotros no hacemos valoraciones para dependencia. Si fuera por nosotros, ya lo tendríamos contratado pero depende de Bienestar Social. Igual que hay médicos que son inspectores de Sanidad o peritos en el Juzgado y no dependen del Servicio Canario de Salud, el médico concreto que hace valoraciones de dependencia depende de otra consejería. Si fuera por mí, ya estaría hecho.

- ¿Sigue teniendo las mismas dificultades para contratar especialistas?

- Contratar gente en Lanzarote siempre es difícil pero esta semana hemos hecho un borrador del balance de gestión y desde el comienzo de la legislatura hemos tenido un total de 554 profesionales nuevos. Por ejemplo, hay 127 personas más en Enfermería; hay 2 más en cardiovasculares para abril la hemodinámica; 3 en geriatría, 2 en hematología, 11 fisioterapeutas porque vamos a empezar a partir de junio otra nueva modalidad de fisioterapia, que estarán en los centros de salud, que harían rehabilitación en atención primaria. Es para ciertas patologías que no son graves, que están tabuladas y protocolizadas y es directamente el médico de familia quien puede enviar a fisioterapia. Estarían en Titerroy, Valterra, Tinajo y San Bartolomé. Con eso se gana tiempo porque no se tiene que ir para un esguince leve del médico de familia a rehabilitación y luego a fisioterapia sino que vas directamente al mismo centro.

- Dice el parlamentario Marcos Hernández que las obras del hospital van muy bien. ¿Está de acuerdo?

- La obra va un poco retrasada pero bueno, a pesar de ir con un poco de retraso, va a buen ritmo. Un edificio de este tipo de tarda entre un año y año y medio en construir y nosotros llevamos con obras desde marzo y nos indican que a finales de junio estaría terminado, a falta de remates. Sigue siendo un récord construir un edificio de estas características. Yo lo estoy esperando como agua de mayo porque ahora estamos operando más que nunca y podríamos tener mucho más rendimiento quirúrgico si tuviéramos la planta de cirugía totalmente ocupada para cirugía pero la planta de cirugía está dividida en dos, para que la mitad se ocupe con pacientes covid y la otra mitad, para cirugía. Cuando esté el edificio nuevo, esos pacientes que están ocupando la mitad de la planta covid, irán a su sitio correcto y podremos operar mucho más y bajaríamos las listas de espera.

- ¿Se van a hacer obras también en la parte vieja?

- Sí, estamos trabajando de forma simultánea. El siguiente objetivo grande es la reforma integral del edificio de psiquiatría. Es algo que tienen que decidir los arquitectos pero todo apunta a que lo que se haga sea demolerlo entero y hacer un edificio de dos plantas, ampliando la unidad de psiquiatría pero tenemos que reubicar a esos pacientes en algún sitio. Antes los reubicábamos en una planta que teníamos cerrada pero esa planta ya no está y nuestro comodín es Hemodinámica. Es un edificio que cuesta 15 millones de euros y no puedes tenerlo cerrado y sin uso y abrirlo solo en las epidemias porque puede que la próxima epidemia que haya sea dentro de 80 años. Por eso, queremos salvar cosas que cumplan dos condiciones, que sean usos temporales, como por ejemplo la reubicación de pacientes psiquiátricos, mientras esté la obra de Psiquiatría en marcha, y cosas que sean fácilmente reversibles como por ejemplo la unidad de atención temprana, a la espera de encontrar una ubicación definitiva.

- Ha dicho la parlamentaria de Podemos María del Río que, con la nueva ley del aborto, se acerca la posibilidad de interrumpir el embarazo en hospitales de referencia cercanos. Sin embargo, curiosamente, el mayor número de médicos con objeción de conciencia en proporción al hospital, estaba en Lanzarote. ¿Qué le parece?

- En nuestro servicio, 9 compañeros de 14 somos objetores, así que se complica el asunto. Con ese porcentaje es imposible desarrollar esa actividad. Estamos buscando un centro concertado en Lanzarote que lo realice para que las mujeres no tengan que viajar. Por otro lado, me llama mucho esta demanda hecha por políticos pero creo que los políticos no escuchan bien a la población a la que pretenden representar porque cuando hablamos con las señoras sobre este tema, muchísimas nos dicen que prefieren irse a Las Palmas a abortar porque consideran que sus derechos a la intimidad y a la discreción se garantizan de mejor manera. Yo creo que lo propio sería que las señoras pudieran elegir. Entiendo que hay algunas que no se lo pueden permitir por temas económicos o por cuestiones de soledad, como dice el partido este que lo reclama, y lo bueno sería que pudieran elegir dónde hacerlo. No me parece bien obligarlas a hacerlo aquí porque hay muchas que no quieren.

- ¿Cree que se han tomado decisiones políticas sin consultar al ámbito médico?

- Y sin consultar a las personas, que es peor todavía. Si preguntáramos a las señoras, probablemente muchas más de la mitad nos dirían que prefieren el sistema actual de enviarlas fuera. A veces el político, con tal de vender un titular y hacer campaña electoral, es terrible, vamos a ver cosas así día sí y día no.

“Si dependiera de mí, ya tendríamos contratado a un médico que valore la dependencia en...