"Actualidad municipal". Este es el término que ha empleado este domingo Coalición Canaria (CC) para definir el contenido de la rueda de prensa que había convocado para este lunes a partir de las diez de la mañana en su sede de la capital de Lanzarote. Sin embargo, todo parecía indicar que además de esa actualidad municipal los nacionalistas iban a aprovechar los primeros días del mes de diciembre para dar por finalizado el pacto que mantenían con el Partido Socialista (PSOE) y con el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL) en el Ayuntamiento de Arrecife. Dicho y hecho. Luego, en la mañana del lunes, a las ocho, los cinco concejales nacionalistas se han presentado en la institución para presentar su renuncia al acta, dejando así en minoría a socialistas e independientes y adelantando el contenido de la rueda de prensa.
En principio estaba previsto que acudieran a la cita con los medios la secretaria general de CC en Lanzarote, Migdalia Machín, y el secretario general en la capital, Orlando Umpiérrez. Aunque en la convocatoria no se decía nada al respecto, era evidente que se producía en uno de los peores momentos por los que ha atravesado un acuerdo de gobierno que ha disfrutado desde su origen de una salud notablemente frágil. Así, parecía lógico, como ya adelantó este diario, que Machín aprovechara la ocasión para acabar con la agonía que han sufrido sus cinco compañeros, los cuales en más de una ocasión han tenido que pedir a gritos que su organización pusiera fin a un acuerdo que consideraban insoportable, especialmente en la parte que corresponde a los socialistas y más especialmente todavía desde que Eva de Anta cogió el testigo al frente de la Alcaldía tras la dimisión de su compañero José Montelongo.
El anuncio coincide además con un momento especialmente delicado para el PSOE: su precipitada salida en verano del pacto que mantenían con CC en el Cabildo y la imposibilidad de que cuajara su evidente deseo de presentar una moción de censura contra Pedro San Ginés no ha hecho otra cosa que complicarles la existencia; a eso se tiene que sumar el ascenso de Dolores Corujo en el Parlamento y su obligada salida de la Alcaldía de San Bartolomé, algo que los socialistas tenían previsto realizar en las dos primeras semanas de diciembre y que se podría frenar si finalmente se confirmar una ruptura del acuerdo de la capital, puesto que Alexis Tejera necesita los votos de CC o de otras formaciones para poder salir elegido alcalde en el pleno que se tendría que celebrar tras la salida del Ayuntamiento de la secretaria general de los socialistas.
Con un escenario tan complejo, CC estaría dando el paso consciente de que tiene margen de maniobra tanto en Arrecife como en San Bartolomé y el Cabildo. En el Cabildo, de hecho, retomaron la pasada semana las conversaciones con el Partido Popular (PP), formación que sigue empeñada en ligar su apoyo a Pedro San Ginés con la llegada a la Alcaldía de Arrecife de su presidenta insular, Astrid Pérez. Así, tras la salida de los cinco concejales nacionalistas del pacto de la capital se abriría la posibilidad de que se pudiera presentar una moción de censura contra De Anta. Para ello, CC y PP tendrían que obtener tres votos más, que en todas las cuentas que han hecho les salen de los dos concejales del PIL y de los dos concejales de Ciudadanos.
La formación naranja, sin embargo, no sólo no ha querido pactar con ellos hasta la fecha sino que ni siquiera se ha querido reunir con el PP, alegando en todo momento la falta de los populares a las formas al intentar saltarse a la representación insular de la formación y al hecho de que no veían ningún tipo de inestabilidad gubernamental en Arrecife cuando CC y PIL seguían apoyando al PSOE en el Gobierno.
Con el nuevo escenario, es evidente también que en Ciudadanos deberían al menos plantearse ya sí la posibilidad de tratar de gobernar, aunque de entrada populares y nacionalistas no lo tendrían nada sencillo para convencerles, especialmente teniendo que hacer con su voto alcaldesa a Pérez. La otra opción numérica pasaría por Somos Lanzarote y por Podemos, dos opciones que en principio ni siquiera se han llegado a plantear en el tablero de las posibilidades que se han barajado.