Fotos:Jesús A. Porteros
La Iglesia de San Ginés se llenó el pasado sábado, pero no para que los feligreses escuchasen la tradicional misa. El Ayuntamiento de Arrecife, a través de la Concejalía de Cultura y Festejos, organizó dentro del programa de eventos de Navidad un concierto de gospel que encandiló al público gracias al ritmo afroamerico de este género musical religioso que llegó de la mano de las voces de Joniece Jamison, Tori y Linda Lee Hopkins, las Divine Gospel Reunion.
El recital, que contó con la colaboración del área de Educación y Cultura del Cabildo de Lanzarote, formó parte del II Festival Gospel de Canarias que traerá hasta las Islas trece conciertos de los mejores artistas del panorama internacional.
El gospel se ha convertido en un género musical que ha traspasado fronteras, alcanzando gran difusión y éxito de público, tanto dentro como fuera de las iglesias. Caracterizado fundamentalmente por el uso de coros en excelente armonía, y por un carácter ligero en cuanto a la música, incluye en su repertorio canciones con diferentes temáticas, aunque buena parte de ellas son de naturaleza cristiana. El canto, además, suele acentuarse con una animada participación del público a través de exhortaciones, palmas e incluso baile.
Tras largos años de carrera por separado en clubes europeos y americanos con actuaciones diversificadas en el pop, el jazz y, sobre todo, el gospel, y aunque ya habían coincidido en algunos discos y colaboraciones, las tres grandes solistas se encontraron reunidas finalmente en escena por una misma pasión y con su propio espectáculo. Tres voces, tres estilos y una misma energía desbordante para compartir con el público, además de la fe, la amistad, el amor y la genuina cultura del gospel.
Su repertorio (gospel y espirituales negros) lo aprendieron en la iglesia cuando eran pequeñas. Con él hicieron gozar al público de Arrecife, que llenó la iglesia, al máximo con una canto que procede de los más profundo de los sentimientos, su esencia vital. Y es que estas artistas demostraron en San Ginés lo que sus privilegiadas voces pueden llegar a hacer.