Los socialistas han revalidado la victoria que obtuvieron en los anteriores comicios con casi once millones de votos, el 43,64 por ciento de los sufragios. De este modo, el PSOE ha obtenido una ventaja en porcentaje de sufragios similar a la que obtuvo sobre el PP en 2004, unos cuatro puntos y mantienen casi la misma distancia en escaños.
No obstante, el PP, que ha logrado más del 40 por ciento de los votos (casi diez millones de sufragios), le recorta al PSOE un diputado con respecto a las legislativas de 2004, año en el que los socialistas obtuvieron 16 escaños de ventaja.
El nuevo reparto de fuerzas en el Congreso de los Diputados consolida el bipartidismo en España, tal y como vaticinaban los sondeos, a costa de los partidos pequeños. En conjunto, las dos grandes formaciones nacionales coparán el 92 por ciento del Parlamento, una cota inédita desde la restauración de la democracia.
IU y ERC, las más perjudicadas
Entre las pequeñas formaciones las más perjudicadas han sido Izquierda Unida (IU), que se queda en dos escaños de los cinco que tenía, y ERC (Ezquerra Republicana de Catalunya), que sufre un severo descalabro y baja de ocho diputados a tres. La gran novedad será la irrupción en la Cámara de un nuevo partido, UPyD (Unión Progreso y Democracia), cuya cabeza de lista por Madrid y ex eurodiputada socialista, Rosa Díez, entrará en el Congreso. Su formación ha obtenido un número de votos similar al del Partido Nacionalista Vasco (PNV) y ERC.
Gaspar Llamazares anunció al conocer los malos resultados de IU que dejará el cargo de coordinador general del partido y achacó el resultado al “tsunami del bipartidismo”.
CC y PNV pierden un diputado que gana el PSOE
PNV y Coalición Canaria (CC) han protagonizado un ligero empeoramiento. Concretamente, un diputado cada formación política. Los nacionalistas vascos han perdido un escaño en la provincia de Vizcaya, escaño que ha ganado el PSOE. A CC le ha pasado lo mismo en la circunscripción de Las Palmas, donde el PSOE ha ganado un diputado a costa de los nacionalistas canarios.
Por su parte, CiU suma un diputado, un total de 11, y puede ser la llave para el gobierno de los socialistas. El BNG mantiene sus dos diputados y NA-Bai conserva el que tenía. Desaparecen del Congreso tanto la Chunta Aragonesista como Eusko Alkartauna, que en la anterior legislatura ostentaban un escaño cada uno.
Casi idénticos resultados de participación
La participación ha sido muy similar a la de las anteriores elecciones. Más de 25 millones de votantes se han acercado hasta las urnas, es decir, un 75 por ciento del electorado y la abstención ha sido de un 24,70. El
Destaca la fuerte caída de las votaciones en el País Vasco, de entorno a ocho puntos menos respecto a hace cuatro años. Cabe recordar que ETA había pedido que no se votara. Asimismo, destaca la elevada abstención registrada el Mondragón-Arrasate, donde la fuerza más votada ha sido, con diferencia, el Partido Socialista de Euskadi, al que pertenecía Isaías Carrasco, el ex edil asesinado por ETA el pasado viernes.
Una nueva etapa
Con algo más del 80 por ciento escrutado, y cuando ya era evidente el triunfo del PSOE, el presidente del Gobierno en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, compareció ante para celebrar la victoria. El candidato socialista aseguró que se abre una nueva etapa para dejar atrás la crispación y ha prometido que gobernará para todos. También ha aseguró que el líder del PP, Mariano Rajoy, ya le había llamado para felicitarle.
Poco después apareció en el balcón de la sede de su partido en la madrileña calle de Génova el candidato popular, Mariano Rajoy. Ante un público más escaso que en otras ocasiones, aunque igualmente entusiasta el jefe de la oposición manifestó que su partido ha sido el que más ha subido en votos y escaños.
