El candidato al Congreso de los Diputados de Nueva Canarias (NC) en las elecciones del próximo 28 de abril, Pedro Quevedo, ha anunciado este vienes su intención de apoyar, si renueva su escaño, una ley de muerte digna a nivel estatal que “posibilite, con las pertinentes garantías, el final anticipado de la vida con el objetivo de evitar alargar el sufrimiento de los enfermos en contra de la voluntad de éstos”.
'La voz canaria en Madrid', como le atribuyen desde Nueva Canarias, explica en un comunicado de prensa que se trata de “despenalizar a quienes ayudan a morir de manera segura, pacífica y sin dolor a una persona que lo pida de forma libre, expresa e inequívoca”.
Nueva Canarias, a través del diputado en el Congreso, recuerda que la muerte digna está definida como “el derecho de los pacientes con una enfermedad irreversible o incurable y en estado terminal a decidir y manifestar su deseo a morir dignamente, con todos los alivios médicos y psicológicos adecuados”.
Además, Quevedo expone que, según un sondeo realizado por el CIS en 2011, “un 77,5% de los españoles apoyaría la aprobación de una ley para regular el derecho de las personas a tener una muerte digna”.
La regulación de esta medida, según el diputado nacionalista progresista, se basa en la “compatibilidad de los derechos fundamentales a la vida y a la integridad física y moral con los bienes, constitucionalmente protegidos, de la dignidad, la libertad, o la autonomía de la voluntad”.
El candidato a la reelección de Nueva Canarias aclara que la ley deberá “definir claramente los supuestos en los que se pueda aplicar la muerte digna” y asegurar que “estén sujetos a garantías suficientes que salvaguarden la libertad de la decisión del paciente, sin que haya ningún tipo de presión externa”.
Se trata, en resumen, recalcó Quevedo, de “respetar la autonomía de las personas y su voluntad de poner fin a su vida en los casos en los que se sufre una situación de enfermedad grave e incurable o de discapacidad grave y crónica”, llegando a padecer “un sufrimiento insoportable que no puede ser aliviado en condiciones que el propio paciente considere aceptables”.
Recuerda el diputado de NC que, durante la pasada legislatura, hubo “varios intentos de legislar sobre la muerte digna”, que no pudieron salir adelante y afirma que, “ante un debate que cuenta con el respaldo de la mayoría de la población, no podemos esperar a que se produzcan casos individuales que conmuevan a la opinión pública para actuar”.
Explica que el caso de María José Carrasco y de Ángel Hernández es “una tragedia que nunca debería haberse producido” y critica que “la ley actual le dé la consideración de delincuente a un hombre que ayudó a morir a su mujer cumpliendo sus deseos”.
Hay que recordar que María José Carrasco sufría esclerosis múltiple desde 1989, con el grado máximo de dependencia desde 2009. No podía alimentarse por sí misma y había manifestado en múltiples ocasiones su deseo de morir “cuanto antes”, llegando incluso a comprar ella misma el fármaco que le suministró su marido.
El cabeza de lista al Congreso por Las Palmas de Nueva Canarias ha expresado que “los partidos políticos no pueden mirar a otro lado mientras se siguen sucediendo estos casos terribles” y ha anunciado que, en consecuencia, promoverá desde el Congreso la reapertura de este debate, “que está arraigado en la sociedad” con el fin de aprobar una ley “de consenso”, que “ayude a las personas a vivir y a morir con dignidad”.