sábado. 20.04.2024

AGENCIAS

El portavoz de la Conferencia Episcopal, Martínez Camino, ha presentado el documento.

La instrucción pastoral de los obispos sobre 'Orientaciones morales ante la situación de España' admite que pueden arbitrarse medidas de "indulgencia" para los terroristas, siempre y cuando se den una serie de condiciones. Además, advierte que "no se puede reconocer a una organización terrorista como representante político".

El documento, cuyo texto íntegro será facilitado a los medios de comunicación la próxima semana, ha sido presentado en rueda de prensa por el portavoz de la Conferencia Episcopal (CEE), Juan Antonio Martínez Camino.

En él se asegura que "una sociedad que quiera ser libre y justa no puede reconocer explícita ni implícitamente a una organización terrorista como representante político legítimo de ningún sector de la población, ni puede tenerla como interlocutor político". En este punto añade que es objetivamente ilícita cualquier colaboración con los terroristas y con los que los apoyan, encubren o respaldan.

Las víctimas del terrorismo ocupan un lugar destacado en este epígrafe. Los obispos les expresan su afecto, respeto y solidaridad, extensibles a sus familiares, amigos y personas que han sufrido directa o indirectamente el terrorismo.

Respecto a los nacionalismos, la Iglesia reconoce la legitimidad de estas posiciones, siempre que, como todo proyecto político justo, se justifiquen en referencia al bien común de toda la población afectada.

No aparece el término "unidad de España como bien moral", -Camino ha negado que "nunca se haya planeado así"- pero sí que se menciona la "unidad histórica, espiritual y cultural" de todos los pueblos de España, como "un bien que debe ser tratado con determinados criterios de tipo moral".

Y en esta línea, los obispos valoran como positivo el "advenimiento de la democracia" y elogian los "grandes valores morales que, sobre el trasfondo de la reconciliación hicieron posible la Constitución de 1978; pero, a continuación, llaman la atención sobre el "peligro que supone dilapidar los bienes alcanzados y reabrir viejas heridas con una utilización de la 'memoria histórica' guiada por una mentalidad selectiva".

El "laicismo radical y excluyente, -añade el resumen facilitado hoy- impulsado por algunos sectores, está en la base de algunas legislaciones, promovidas recientemente en España, que deterioran gravemente el bien común de una sociedad, formada en buena parte por católicos".

"La unidad histórica y cultura de España -dicen los prelados- puede ser manifestada y administrada de muy diferentes maneras. En esta cuestión la Iglesia se limita a recomendar a todos que piensen y actúen con la máxima responsabilidad y rectitud, respetando la verdad de los hechos y de la historia, considerando los bienes de la unidad y de la convivencia de siglos, y guiándose por criterios de solidaridad y respeto hacia el bien de los demás".

La CEE recalca también que para mejorar la democracia "es absolutamente necesario respetar el recto funcionamiento de las instituciones, especialmente la autonomía del poder judicial y la libertad de los jueces", así como el respeto y protección de la libertad religiosa.

La instrucción pastoral fue aprobada en la tarde del jueves, tras un amplio debate a lo largo de la semana, por 63 votos a favor, 6 en contra, 3 abstenciones y 1 voto nulo, del total de 78 obispos que tienen derecho a voto.

Los obispos dicen que los terroristas no pueden ser 'interlocutores políticos'
Comentarios