El presidente del Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), Ramón Bermúdez, ha desmentido este viernes la acusación de Carmelo Corujo, el afiliado del PIL que presentó este pasado miércoles una denuncia en la Policía Nacional, después de que la dirección del partido le impidiera supuestamente inscribir como compromisarios a otros 25 compañeros como compromisarios, de cara al Congreso extraordinario que los insularistas prevén celebrar el próximo 3 de diciembre.
Bermúdez ha asegurado en el programa 'A buena hora' de Crónicas Radio-Cope Lanzarote que las normas para el Congreso del PIL recogen el requisito de inscribirse en persona como compromisario, un aspecto, ha garantizado, que el propio Carmelo Corujo conocía. "Me dan pena estas situaciones. Carmelo intentó presentar una veintena de solicitudes cuando sabía perfectamente, porque así se aprobó en el Consejo Político, que los militantes que quieran participar como compromisarios para poder decidir desde sus respectivas asambleas, deben ir a la sede personalmente o, en caso de imposibilidad, mandar al menos un correo electrónico personal", ha manifestado Bermúdez. "También los presidentes, como medida excepcional, pueden recoger estas solicitudes. Se le explicó por parte de la Comisión organizadora por activa y por pasiva", ha remarcado el presidente del PIL, "pero él alegaba que tenía un poder para expresar la voluntad de otras personas". Sin embargo, Ramón Bermúdez advierte de que entonces Corujo matizó que "se trataba de un poder personal y que no podía enseñarlo". "No estamos en el siglo pasado, solo hacía falta una autorización y se hubiera aceptado", ha explicado.
Carmelo Corujo aseguraba en su reclamación que a otra representante de la actual gestora sí le dejaron registrar a personas como compromisarios que no estuvieron presentes en la sede. "No contento con eso, fue a la Policía", ha lamentado por el contrario el presidente del partido, que aclara que "la otra militante era su propia hermana, María Dolores Corujo, que también trataba de colar a su propio hijo, al sobrino de Carmelo". El dirigente del PIL ha apuntado que incluso se le solicitó a María Dolores Corujo de la necesidad de que su hijo se acercara a la sede ya que "vive a cinco minutos de la sede del partido", o de que mandara un email al menos.
Bermúdez ha acusado a Corujo de tratar de inscribir el mismo miércoles por la noche desde su propio ordenador personal a esos militantes cuya solicitud no fue recogida a esas horas ya que "a las 23.40 horas ya estaba fuera de plazo".
"Carmelo Corujo estuvo presente en el Consejo Político en el que se aprobó el reglamento y no dijo ni mú", ha manifestado el presidente del PIL, que ha detallado que entre la lista de personas que este militante trató de apuntar, figuraban "nombres interesantes de personas que aparecen y desaparecen como el Guadiana y de algunos jubilados que podían haber aparecido por el partido y haberse inscrito".
En cualquier caso, Ramón Bermúdez, que ha reconocido sentir "decepción personal" con los militantes Carmelo y María Dolores Corujo, ha confiado en que el PIL pueda celebrar el próximo 3 de diciembre al Congreso extraordinario.
El papel del Comité Local de Teguise y el pasado y futuro del partido
Además, cuestionado sobre el vínculo de esta denuncia ante la Policía Nacional con las actuales diferencias que viene manteniendo la dirección del PIL con su extinto Comité Local de Teguise, Bermúdez ha advertido de que esa posible relación "está más clara". "Cuando se fue a la Policía a poner esa denuncia la gente de Teguise estaba mandando una copia de la denuncia a los propios compañeros de Teguise, y la gente de Teguise y algunos que estaban entre esos nombres estaban llamando y coaccionando, haciéndose eco de la denuncia".
Al respecto, ha señalado que "quizás lo que interesa y sea bueno ya en este momento es que la Justicia meta las narices en esta organización, en el pasado, en el presente y seguramente en el futuro, para que todo se aclare, porque no tenemos problema ninguno". Para Bermúdez, el PIL está inmerso "en una época en la que queremos hacer las cosas bien".
El presidente del PIL ha pedido a Carmelo Corujo "que diga la verdad y que no mienta tan descaradamente". "Él sabrá a qué atenerse", ha advertido. "Afortunadamente, en San Bartolomé le conocemos", ha apostillado.