La formación Nueva Canarias-Bloque Canarista (NC-bc) en Lanzarote y La Graciosa destaca este viernes en nota de prensa que ha celebrado este Día Internacional del Orgullo LGBTI reivindicando una Isla-Hogar que combata los discursos de odio y ponga freno a la intolerancia hacia la diversidad sexual que, desgraciadamente, hoy en día se sigue produciendo en la isla y en Canarias.
Así lo expone Montse Cedrés, Secretaria Insular de Igualdad y Diversidad Sexual de NC-bc, que mantiene que en “Lanzarote se ha avanzado mucho en tolerancia y respeto por la diversidad sexual” pero, sin embargo, “en los últimos años se ha notado un avance de los discursos de odio y agresiones verbales en relación a la agitación que vierte la extrema derecha”.
Desde la organización canarista consideran necesario la apuesta decidida de políticas educativas, planes de formación en empresas, colectivos, instituciones y medios de comunicación, la creación de puntos municipales e insulares de información y ayuda, y una colaboración con los colectivos y asociaciones de la isla para elaborar estrategias conjuntas.
“Los Ayuntamientos de la isla y el Cabildo Insular pueden y deben promover la protección de las personas LGTBIQ+ de Lanzarote y La Graciosa a través de planes y estrategias educativas que visualicen la importancia de la libertad y la igualdad, y el rechazo a comportamientos de intolerancia, acoso, violencia y discriminación”, señala Montse Cedrés, que ve fundamental una mayor promoción de la legislación vigente como la “Ley 2/2021, de 7 de junio, de igualdad social y no discriminación por razón de identidad de género, expresión de género y características sexuales” de Canarias, que garantiza un amplio marco de derechos para las personas del colectivo.
Por otro lado, desde NC-bc felicitan el acuerdo alcanzado por los grupos políticos e instituciones de Lanzarote, salvo la ultraderecha de Vox, con los colectivos sociales, para ratificar el Primer Pacto Insular Contra Discurso de Odio y Visibilización de la Comunidad LGTBI, y que se ha firmado hoy en el Cabildo Insular.
Un pacto, señala Cedrés, que “debe ser la hoja de ruta para seguir reivindicando una Lanzarote orgullosa de lo que quieran sentirse y ser las personas que la habitan”.