viernes. 29.03.2024

“Las piscifactorías se van a parar porque serían la muerte para toda la costa este de Lanzarote”

"Claro que se debe aprovechar del anterior proyecto del Plan Insular"

"Me he reunido con otros sectores implicados con la extracción del jable como son el promotor de la única autorización abierta para ver qué posibilidades hay de consenso. Es un tema complicadísimo y no quería reunirme con los transportistas sin poner una solución encima de la mesa"

La consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote, Elena Solís, asegura que se pelearán con el Gobierno de Canarias para que no se instalen las jaulas de acuicultura en la Isla, tal y como dijo en recientes declaraciones en Crónicas Radio el director insular de Pesca que aseveró que la acuicultura terminará por implantarse. En el programa “A Buena Hora” de Crónicas Radio – Cadena Cope de este viernes, Solís también destacó el buen transcurrir de las conversaciones con todos los agentes sociales y económicos de Famara, desde vecinos, hasta escuelas de surf o propietarios de viviendas vacacionales, entre otros, para consensuar las medidas necesarias para que no se pierda la identidad de enclaves como la Caleta de Famara y se regulen los mecanismos necesarios para que todos podamos disfrutar del lugar sin destrozarlo. También comentó con satisfacción el éxito que supone la reapertura del camping de Papagayo, en principio con carácter de continuidad, y aportó algunas de las normas que regirán este lugar de disfrute histórico para cientos de conejeros y turistas.

- ¿Ha pensado ya lo de “si lo sé, no vengo” teniendo en cuenta todo el trabajo que está teniendo en el Cabildo?

- Es una cuestión de poner voluntad. Sí tengo una cartera muy llena porque no es solo medio ambiente sino Bienestar Animal, Reserva de la Biosfera, Geoparques y una serie de temas que requieren mucha atención.

- Hablando de la Reserva de la Biosfera, se ha activado el Consejo, que es un órgano muy importante. ¿Qué tiene usted pensado para él?

- Precisamente nos reunimos este viernes en los Jameos del Agua. Yo tengo que aprovechar la oportunidad que tengo de intentar hacer lo mejor posible para la sociedad. Considero que la Reserva de la Biosfera es un órgano que se debe preocupar del territorio y de la diversidad pero también de los habitantes. Ese es el nuevo enfoque que quiere dar en ese sentido. Voy a hacer una serie de propuestas al órgano de gobierno, a la junta rectora en la que les presentaré esta nueva etapa. Hemos pasado varias crisis, estamos en una crisis y tenemos que pensar que este órgano no tiene que ser un órgano político sino civil, de reflexión y de consenso. Voy a intentar que ese sea el caso. Por eso hemos elegido los Jameos y no el pleno del Cabildo porque me parece que es importante esa señal.

- Van a tener que abordar temas comprometidos como el de las jaulas marinas que se está debatiendo en la parte política y la población también tendrá que hablar. Lo que pasa es que el director de Pesca del Gobierno de Canarias dijo hace unos días en este programa que es un tema que va a ser imposible pararlo y que tarde o temprano tendrán que llegar a Lanzarote. ¿Cómo lo ve?

- El gabinete científico, que es uno de los órganos que está en la Reserva de la Biosfera, está para aconsejarnos, y lo que les vamos a plantear es que nos dirijan en qué tipo de isla queremos en los próximos diez años. Una de las cosas que José Manuel Naredo habla en sus libros es en la necesidad de parar este sistema económico caníbal y el tema de las piscifactorías es un ejemplo claro en el que hay enfrentados dos sectores económicos y ya no se trata de un tema de lo que es tradicionalmente la economía de explotar al trabajador, se trata de comerse unos sectores a otros. Tenemos al sector de la acuicultura que está claramente intentando, por sus intereses propios, que está atacando a otro sector muy importante, el turístico. Este tipo de concentraciones entre dos sistemas económicos y es algo típico de lo que está pasando. Es el caso de las piscifactorías. Se tienen que parar y se van a parar porque sería la muerte para la costa este de Lanzarote. Como bien ha dicho la presidenta del Cabildo, no es posible este modelo económico caníbal.

- Van a tener que pelear con el Gobierno de Canarias…

- Nos vamos a pelear con el Gobierno de porque la economía de Lanzarote depende del turismo, no de una o dos compañías que están interesadas en contaminarnos todas las costas de Lanzarote. Eso no tiene ningún sentido.

- El Consejo de la Reserva de la Biosfera no se va a meter pero uno de los temas importantes de esta semana ha sido el anuncio de que se iba a tumbar el proyecto del Plan Insular, con el dineral que ha costado, y se va a empezar de cero con otro. José María Ezquiaga, el urbanista que lo ha llevado, y dice que es una lástima y que hay mucho trabajo que se debería aprovechar. ¿Qué piensa usted?

- Claro que se debe aprovechar y aunque no es mi competencia, hablo con Política Territorial. Es un tema complejo y que a mí me afecta directamente porque al no tener planificación territorial, teniendo en cuenta que el 50% de la Isla son espacios naturales protegidos, de los cuales soy directamente responsable, afecta en el hecho de que desde Medio Ambiente no podemos gestionar la sobrecarga en el parque natural de los volcanes y demás zonas. Me consta que se está trabajando en ese sentido y que no es fácil porque el Cabildo necesita más juristas y más personas que puedan abordar estos temas. Dada la pandemia, ha sido difícil reorganizar las cosas en el Cabildo pero aunque se está trabajando, los medios que tenemos son los que son.

- ¿A qué conclusión han llegado tras las reuniones mantenidas con los vecinos de Famara?

- Hemos tenido reuniones de la comunidad de Caleta de Famara, de la de Island Home, Los Noruegos junto con otros sectores económicos como las escuelas de surf , la parte hotelera, alquiler vacacional… Hemos contratado a una agencia desde el Cabildo para abordar las conclusiones de estas reuniones y hemos visto que hay necesidad de proteger ese espacio único. Famara es parte de la Red Natural 2000 donde hay una flora única en el mundo y especies únicas en peligro de extinción como la hubara, que hay que proteger. También hay que proteger la identidad del pueblo de Caleta de Famara. Hay una serie de problemas logísticos en Island Home con el tema de aguas para que contaminen menos. Sorprendentemente todos los sectores están de acuerdo en que se necesita regular de alguna manera los espacios públicos; es decir, toda la parte de El Papelillo o El Rincón, la parte de atrás de Los Noruegos y las pistas que van paralelas a la playa donde hay un uso de espacios que se necesitan controlar y regular. No es tanto prohibir como regular. Ahora lo que tenemos que hacer las administraciones es sentarnos. Estuvimos en las dos sesiones que tuvieron lugar la semana pasada con el Ayuntamiento de Teguise, el Cabildo, el Gobierno de Canarias y Costas y ahora tenemos que ponernos a trabajar en un diseño. Previamente yo ya he encargado un estudio sobre cuáles son los impactos que se están produciendo en Famara en relación al tráfico y los diferentes usos de la playa, con el tema de las caravanas, las escuelas de surf… de manera que todos podamos convivir pero no que vayas un fin de semana a Famara y no puedas pasar de las colas que hay.

- Abrir la zona de Papagayo ha sido fundamental para derivar el tráfico de las autocaravanas…

- Sí. En principio, la iniciativa fue aliviar las acampadas informales porque tenemos un espacio fantástico en el sur que tenemos que aprovechar. En el pasado, ese espacio ha producido deudas y muchas pérdidas. Hemos tenido que tomar decisiones los tres consejeros de Podemos en relación a cómo abrir el camping. Hemos tenido que sufragar la deuda anterior con nuestros propios presupuestos y después hemos tenido que decidir cómo abrir Papagayo. No se podía abrir con todos los servicios, con baños, entre otras cosas porque los que había estaban totalmente destrozados, así que hemos pensando que la manera de hacerlo es como se está haciendo en las zonas de acampada de otros sitios, con caravanas autosuficientes o con casetas pero que tengan un servicio químico. Habrá la posibilidad del servicio de aguas grises y de agua pero nada más porque si no, no salen los números y no podríamos haber abierto. Además, queremos abrir para todo el año. Vamos a tener una aplicación para reservar y ver si hay sitio o no. No te puedes quedar más de una semana porque todo el mundo tiene derecho a utilizar ese espacio.

- La asociación de transportistas se ha quejado de que habían convocado una reunión con ellos para hablar del tema de la extracción de áridos pero que la han suspendido. ¿Qué tiene previsto?

- Me he reunido con otros sectores implicados con la extracción del jable como son el promotor de la única autorización abierta para ver qué posibilidades hay de consenso. Es un tema complicadísimo y no quería reunirme sin poner una solución encima de la mesa y he tenido que hablar con muchas personas. No tenía mucho sentido reunirme con los transportistas si no tenía en la mano una solución, que no hay. Voy a pedir que se delimite una zona muy clara de lo que es la zona minera que existe porque está agotada para ver si la podemos ampliar. Ese espacio, aunque tradicionalmente se ha utilizado para la construcción, es un tema excepcional. Fuerteventura y otras islas no tienen esa posibilidad de extraer áridos así que hay que llegar a acuerdos y lo que estoy intentando es proponer, a través del Gobierno de Canarias, subvenciones para que los áridos se traigan de fuera, que es lo que pasa en el resto de las islas. Sé que cuesta trabajo entenderlo pero no podemos permitirnos destrozar el jable. Me gustaría poder resolverlo pero no es fácil.

- Han anunciado el Centro de Conservación de la Cultura Campesina. ¿En qué consiste?

- Tenemos que tener un centro vivo donde va a haber un banco de semillas, con su propio protocolo con personas autóctonas de Lanzarote que están preparadas para catalogarlas y que a partir de ahí, haya un intercambio con los agricultores ecológicos y gente interesada. Queremos potenciar los paisajes únicos de Lanzarote como campos vivos de cultivo. Este centro irá a otro proyecto, el agroecológico en Argana, donde habrá un intercambio para el cultivo de semillas. 

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