Fotos: Dory Hernández
"Ir contra los más humildes ¡no es la solución!". Bajo este lema y con una enorme pancarta dando algo de sombra en una tarde de bochorno se reunieron decenas de vecinos del pueblo de Tenezar, en Tinajo, para protestar contra lo que consideran que está siendo un abuso por parte de la Dirección General de Costas.
Los vecinos de este pago, un núcleo consolidado desde antes de que se hiciera efectiva la Ley de Costas, no entienden la constante amenaza que se cierne sobre sus viviendas, la constante sombra de una pala mecánica o de una sanción administrativa que puede aparecer en cualquier momento.
En un ambiente distendido, pero tenso, los vecinos manifestaron de forma pacífica su justa reivindicación, justa desde cualquier punto de vista, incluso desde el punto de vista de los políticos que acudieron. Allí estuvo al frente de los vecinos su alcalde, Jesús Machín, que se comprometió una vez más a hacer lo posible para que no se derribe una sola vivienda.
Curiosamente, a su lado estuvo el senador por la isla de Lanzarote, Marcos Hernández, quien en un principio había excusado su presencia porque tenía otro compromiso. Finalmente decidió renunciar a ir a la cita en la que iba a compartir reunión con el diputado nacional Miguel González y se plantó en el pueblo de su municipio de residencia, donde también ejerce como portavoz del único partido de la oposición municipal. El senador, una vez más, intentó trasladar un mensaje de tranquilidad a los asistentes, asegurando que sus casas no van a ser derribadas.
En cualquier caso, los vecinos de este pago de Tinajo siguen con la misma duda que los vecinos de otros núcleos costeros de Lanzarote (lugares como El Golfo, Caleta de Famara, Caleta de Caballo...), no tienen muy claro que las promesas de los políticos vayan a tener efecto.
