El Consorcio Insular de Aguas, propietario de la empresa pública Insular de Aguas de Lanzarote, Inalsa, S.A., ha dado este lunes por la mañana el visto bueno al incremento de las tarifas de abastecimiento y saneamiento, que se hará efectivo en los próximos meses.
Esta decisión responde a la necesidad de ajustar los gastos de producción generados por la desalinización del agua, que han aumentado notablemente en los últimos años por el encarecimiento de los combustibles fósiles. Según la empresa pública, el coste se ha incrementado en un 45% en la última década, mientras que las tarifas se han mantenido sin modificaciones desde hace más de 20 años.
La propuesta, aprobada por unanimidad en el seno del Consorcio Insular de Aguas, difiere con la que pretendían aplicar los administradores concursales de Inalsa, que suponía incrementos de hasta el 40% en algunos tramos de consumo y una cuota de servicio para cada usuario que estaba fijada entre los 4 y los 12 euros.
Y es que, según los cálculos de la Gerencia del Consorcio Insular de Aguas –único órgano competente y soberano para establecer el precio del Agua– los costes de producción que hay que cubrir "son sensiblemente inferiores a los propuestos". Es decir, los costes de referencia que pretenden aplicar los administradores son los de 2008, y los que ha propuesto la Presidencia y que han sido aprobados por el Consorcio son los de 2010.
En definitiva, la actualización de las tarifas propuestas –que pasan a ser tasas-, según tramos y tipo de consumidor, es la siguiente:
- Establecimiento de una cuota de mantenimiento por disponibilidad de la red de 2 euros mensuales, y eliminando la cuota mínima por consumo, que era de 6 euros.
- Para consumo doméstico:
En el primer tramo -de 0 a 10 toneladas-, se mantiene idéntico precio. Con lo que al desaparecer la tarifa mínima de consumo, en realidad se está reduciendo la recaudación por este concepto en más de 300.000 €.
En el segundo tramo –de 11 a 30 toneladas–, se incrementa la tasa en un 5 %.
En el tercer tramo –de 31 a 40 toneladas–, se incrementa la tasa en un 8 %.
En tramo más alto –más de 40 toneladas–, se incrementa la tasa en un 10 %.
- Para consumo doméstico de Jubilados y familias numerosas:
En el primer tramo –de o a 10 toneladas–, se reduce la tasa en un 15%.
En el segundo tramo –de 11 a 30 toneladas–, se reduce la tasa en un 5%.
En el tercer tramo –de 31 a 40 toneladas–, se mantiene la tasa actual.
En el tramo más alto –más de 40 toneladas–, se incrementa la tasa en un 10%.
- Para el consumo industrial/turístico: la tasa única se incrementa en un 8%.
- Para el consumo agrícola: no se suben las tasas.
En definitiva, se actualizan las tasas "penalizando el derroche y primando el ahorro, y se establece una cuota de mantenimiento que si bien -salvo en el primer tramo de consumo doméstico en que se reduce la recaudación- supone una mejora importante de la recaudación, al ser fija no puede ser interpretada en términos porcentuales". El resultado de estas medidas supondrá un incremento de la recaudación por estos conceptos, estimado en 2.127.000 euros; equilibrando así los costes de producción con los ingresos, tal y como establece la Ley.
Por otra parte, cabe destacar que a partir de ahora será el Consorcio Insular de Aguas y no INALSA, quien asuma la gestión de los ingresos procedentes de la producción y suministro del agua.
Desacuerdo en los socios de gobierno
Por otro lado, los tres portavoces y presidentes de los partidos políticos que son socios de gobierno de Coalición Canaria (CC) y el presidente del Cabildo, Pedro San Ginés, han manifestado este martes abiertamente su discrepancia con la subida de tarifas planteada por la Presidencia y ratificada por el Consorcio Insular de Aguas.
Por un lado, el presidente del Partido Nacionalista de Lanzarote (PNL), Juan Carlos Becerra, sostiene que está "en desacuerdo" y confirma que así se lo ha "manifestado al presidente del Cabildo y actual candidato de Coalición Canaria al Cabildo". A su juicio, "lo que no se puede hacer es ir siempre a lo fácil: cuando una empresa pública está mal gestionada y hay una irresponsabilidad manifiesta en esa mala gestión, no se adoptan medidas para reestructurar el Consejo de Administración y que la empresa no tenga pérdidas". Para Becerra, "hoy en día hay métodos mucho más baratos para producir agua. Cuando existe el problema de las pérdidas de agua en red, por encima del 45%, no se afronta; solo se hace que repercuta en el bolsillo de los ciudadanos. Eso no se llama gestión, sino tirar de la maquinita, sacando el déficit de la empresa a costa del bolsillo de los consumidores".
"Falta de alternativas"
El presidente del PNL criticó la falta de renovación en Inalsa, la ausencia de mayor control en la calidad y cantidad de producción. "Es solo una medida coyuntural con la que no podemos estar de acuerdo", dijo.
Becerra denunció la falta de alternativas a la propuesta de San Ginés. "hemos dicho una y otra vez que hay que modificar los estatutos de la Sociedad, dando entrada, como antes, a las organizaciones de consumidores, al Colegio de Ingenieros y al Colegio de Abogados. La empresa debe ser mucho más transparente, la gestión profesionalizada, con sustitución regular de membranas y ahorro energético". En este sentido, lamentó que la media en España de producción de energía eléctrica por renovables sea del 22 por ciento, mientras que en Canarias esa producción solo alcanza el 4 por ciento. "Así no se puede mejorar la empresa, con una medidas aisladay fácil", sostuvo.
"El pueblo paga la mala gestión"
Por su parte, la presidenta insular del Partido Popular (PP), Ástrid Pérez, insistió en su mensaje y recordó que "Inalsa ha sido gobernada por PSOE, PIL y CC, hasta llevarla a una deuda de 40 millones de euros. La mala gestión en Inalsa de socialistas y nacionalistas ha llevado a la empresa a esta situación- ¿Por qué los errores en la gestión del agua del socialismo y del nacionalismo los tiene que pagar el pueblo?", cuestionó. "Creo que tiene que subirse el precio del agua únicamente hasta los costes de producción. No a la subida del agua para pagar la mala gestión de socialistas y nacionalistas", concluyó.
"No a la gestión directa del Consorcio"
Por último, el presidente del Partido de Independientes de Lanzarote (PIL), Fabián Martín, ha asegurado que discrepa con la propuesta del presidente del Cabildo de Lanzarote, Pedro San Ginés, basada en que Inalsa pase a ser gestionada directamente por el Consorcio Insular de Aguas, compuesto por la Primera Corporación insular y los siete ayuntamientos.
“A mí me parecería un error, en eso discrepo con el presidente, y él lo sabe, que se disuelva la empresa y que la gestión pase a manos del Cabildo y los ayuntamientos”, afirmó. Martín argumentó sus palabras señalando que “si en todo este tiempo los ayuntamientos no han sido sensibles a su obligación de producir y distribuir el agua de consumo doméstico, ahora no van a ser capaces de gestionar una empresa en la que han tenido responsabilidades y de la que, además, son propietarios. El Cabildo, como accionista mayor, ha hecho frente a todas sus obligaciones en Inalsa. En un momento en el que las instituciones están engordadas de responsabilidades, me parecería un error el que les recayera otra responsabilidad, el de la distribución, una gestión puramente de los ayuntamientos, que no es puramente intrínseca”.
Para el vicepresidente del Cabildo, siguen estando vigentes las tres medidas propuestas hace unos meses de forma oficial por el PIL: introducir capital privado en la empresa Insular de Aguas S.A., Inalsa, o sacar a concurso público la gestión integral del agua en Lanzarote, es decir, el ciclo que comprende la distribución y reutilización del agua en la Isla. La tercera vía para reflotar a Inalsa es prácticamente imposible, según el PIL. Y es que la aportación de capital público por parte del Consorcio Insular de Aguas se antoja más que complicada dada la difícil situación económica por la que atraviesan las administraciones públicas de Lanzarote.
“El capital privado, de forma voluntaria o de manera más forzosa, va a llegar a la empresa, bien en parte bien de forma global, o bien en forma de externalización, para garantizar el suministro del agua en Lanzarote", apostilló.
