El alcalde de Arrecife, Cándido Reguera, sigue sin entender la actitud mostrada por la oposición, especialmente por parte de Alternativa Ciudadana, en el pleno celebrado este lunes hasta altas horas de la noche y que se prolongará este martes por la tarde. A su juicio, lo único que están tratando de hacer es frenar la labor del Gobierno, impedir que se hagan cosas, y “todo con fines electoralistas”. “Está claro que hay mucho interés en paralizar a la institución por parte de la oposición, tal vez fruto de la fiebre electoral que sufren. No se les ve propuestas y alternativas que sean constructivas, puesto que lo único que les preocupa es deteriorar al actual grupo de gobierno a pesar de que con ello se deteriore la ciudad”. Con esta contundencia se manifestó el máximo responsable de la Corporación capitalina durante su intervención en el programa “A buena hora de Crónicas Radio”, donde los portavoces de Partido Socialista Canario (PSC) y Alternativa Ciudadana ratificaron su idea de que la sesión en la que se tomó en consideración la renuncia de Antonio Machín y Luisa Blanco se tendría que repetir.
“Hay un par de grupos que tratan de sembrar confusión y dudas, que no les gusta que el secretario les diga que las convocatorias son correctas. Siguen insistiendo y siguen en una actitud que no conduce a nada, aunque no pasa nada para que consulten”, explicó, añadiendo que “no entiendo eso sí la actitud de descalificación permanente que algunos portavoces llevan a cabo”.
En lo referente a la recuperación de la mayoría, Reguera dijo que “ante la actitud de los miembros de la oposición les tuve que decir que si me iban a pedir la ratificación también del magistrado del Supremo que tiene que mirar el tema de las credenciales”. “No sé por qué hay tanto empeño en sacarle punta a este asunto, porque yo no puedo obligar a nadie a que vaya a un pleno a ratificarse, y no hay ningún sitio en el que se diga que esto es así”, afirmó rotundo, insistiendo en que “todo hace ver que lo que se busca es que sigamos en minoría”.
Lo más esperpéntico para él es que se llegara a dejar caer que los dos concejales, Luisa Blanco y Antonio Machín, podrían estar secuestrados. “Yo no sé cómo don Enrique (Pérez Parrilla) puede hacer ese tipo de afirmaciones”, comentó. “Si tienen dudas, que les pregunten cómo han presentado la dimisión y por qué, porque aquí se ha hecho todo como manda la ley. Ayer no era la ratificación, era la notificación, y no sé qué será lo próximo”, insistió por último.
Visión del portavoz socialista
El portavoz del PSC en la institución, Víctor Betancort, comentó también este martes en Crónicas Radio que por su parte no van a impugnar el pleno, aunque sí que echaron en falta una serie de procedimientos, como que las convocatorias sean en tiempo y forma. “Se ahorraría dinero si las cosas se hicieran bien”, explicó. “Estamos ante un procedimiento extraño, porque cuando un concejal dimite lo normal es que se ratifique, como garantía jurídica de que no va a haber vuelta atrás. No entendemos cómo la ratificación y la convocatoria del pleno de la dimisión cuentan con los propios implicados, y esperemos que no se produzca ninguna repercusión para Arrecife”, insistió.
Para él, el pleno del lunes, al margen de la polémica, fue un pleno de procedimiento, con asuntos importantes que no se tendrían que haber aprobado como es el tema de los asesores o el tema de la gestión indirecta del servicio de guaguas.
Betancort, por otro lado, quiso resaltar que le pareció “muy oportunista” la propuesta de los grupos del Gobierno en el que se pedía el rechazo a la congelación de las pensiones, puesto que se trata de un asunto de sobra explicado por los socialistas y que no se ajusta a lo que se está diciendo. “Estamos afrontando una situación difícil, con mucha gente en paro, y el dinero tiene que salir de algún lado”, comentó.
Visión del portavoz de Alternativa
El portavoz de Alternativa Ciudadana, Ginés Quintana, insistió en que lo que sostiene su partido es que “la toma de posesión de los dos nuevos concejales tiene sombras de dudas porque no queda claro que los que dimitieron se ratificaran y fueran convocados para el pleno que se celebró”. “Si eso es como nosotros decimos, estas dos personas no tendrían que haber tomado posesión”, indicó.
Quintana no quiso entrar en rumores o noticias sobre ficticios secuestros. “El secretario nos confirmó que a uno de los dos concejales dimitidos no se le localizó para notificarle el pleno, después de que se hicieran no pocos intentos. El otro concejal dimitido tampoco firmó la convocatoria, porque lo hizo un familiar”, dijo, para añadir que “la gente es libre de pensar lo que quiera, pero lo único que nosotros queremos es que las cosas se hagan bien”.
De este modo, puso un ejemplo de lo que podría ocurrir en el caso de que se hicieran oídos sordos a su reclamación, que alguno de los dos concejales que presentaron su dimisión decida dar marcha atrás. “¿Qué haríamos, volveríamos a tener en esta isla un caso insólito para seguir siendo los pioneros en cosas raras?”, preguntó, haciendo hincapié en que “por muy pequeño que sea Lanzarote, los conductos oficiales hay que seguirlos hasta el final, y las cosas hay que hacerlas bien, porque estas dos personas tienen que estar legitimadas”.
El portavoz de Alternativa se refirió a los asuntos trascendentales en los que los dos nuevos concejales del PIL han participado, especialmente el tema de las guaguas, tema por el que a su modo de ver diez familias se van a quedar sin trabajo. “Tenemos que tener garantías jurídicas de que estas personas están habilitadas para tomar ese tipo de decisiones, porque nosotros tenemos dudas”, relató. “A estos cuando hablan les escucho con mucho esfuerzo, por el nivel de canallismo y demagogia que escucho. La empresa que entre ahora va a hacer contratos temporales y no va a respetar los beneficios sociales que las personas por sus convenios tenían hasta ahora. ¿Qué pasa con las diez familias de esas personas?”, preguntó.
