El Ayuntamiento de Arrecife ha recibido hasta con sorpresa la sentencia que le otorga la razón en el caso del centro comercial que pretendía construir Hiperdino en el barrio de Valterra. Sorpresa, dice el concejal de Plan General Ubaldo Becerra, porque ya las instituciones públicas parece que se estuvieran acostumbrando a perder los pleitos con las firmas privadas. En este caso, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) comparte las tesis defendidas por el Consistorio que en el año 2000 denegó la licencia de construcción al centro comercial por considerar que contravenía el planeamiento urbano. En su momento, la alcaldesa de la capital era Manuela Armas, actual presidenta del Cabildo de Lanzarote, ahora en filas socialistas y entonces en Coalición Canaria.
No deja de ser un trago amargo
El fallo judicial favorable al Ayuntamiento supone un alivio para las arcas municipales, porque estaba latente la amenaza de una indemnización millonaria que podría superar los 15 millones de euros. Ubaldo Becerra está complacido por el sentido del fallo aunque dice que una sentencia judicial siempre deja un trago amargo para una de las partes en conflicto y desde ese punto de vista es mejor la conciliación que llegar a los extremos. El centro comercial preveía extenderse por más de 32.000 metros cuadrados y levantarse en tres plantas en una parcela de uso industrial. Uno de los aspectos argumentados por el Ayuntamiento se refiere a la práctica imposibilidad de construir en suelo industrial grandes superficies comerciales, y en cambio sí, pequeños comercios para garantizar las demandas de la zona.
