La UD. Lanzarote demostró este domingo en Pasarón que este año no tiene techo al derrotar por 1-2 a uno de los equipos más potentes de la categoría, el Pontevedra, que asistió incrédulo a la remontada rojilla con los goles del reaparecido Gómez y de Nene, que neutralizaron el tanto inicial de Igor para los gallegos.
El conjunto rojillo llegaba a Pontevedra con la vitola de ser el mejor equipo como visitante del grupo I, ya que los de Paco Gutiérrez no pierden lejos de la Ciudad Deportiva desde el pasado mes de abril, y lo cierto es que el conjunto conejero se mostró como un rival incómodo y que nunca dio el partido por perdido.
El Pontevedra, crecido tras su clasificación para la siguiente ronda de la Copa del Rey el pasado miércoles, salió en tromba en busca de la victoria ante la UD. Lanzarote, que en los primeros minutos pasó muchos problemas para contener los ataques granotas. En este sentido, el colegiado del encuentro anuló un gol a los gallegos pasado el primer cuarto de hora por un discutible fuera de juego.
La insistencia de los locales tuvo su premio pasada la media hora de juego, cuando Igor batió a Alberto tras ganar la espalda a la defensa rojilla. Los conejeros acusaron el tanto, y bastante hicieron con mantener el resultado hasta el final de la primera mitad.
En la reanudación el conjunto de Paco Gutiérrez se quitó su complejo de inferioridad y tuvo más presencia en ataque, sobretodo por medio de Dani Mallo, que remató con la nariz un remate franco que no significó el 1-1 de milagro.
Pese a ello, los rojillos se quedarían con diez hombres a los 30 minutos de la segunda parte por la expulsión de Pereira, lo que hacía presagiar que los tres puntos se quedarían en casa.
Nada más lejos de la realidad porque primero Gómez, al saque de un córner, y posteriormente Nene, al contragolpe, le dieron la vuelta al marcador y rescataron tres puntos para el conjunto rojillo que se sitúa en el segundo puesto de la clasificación.
