Por Héctor Pulido, miembro de ASOLAN
Sin saber aún si de esto se trata, de una comedia, en este caso comedia política, esta en escena actualmente tan “soberano enfrentamiento” al que asistimos todos los ciudadanos de esta isla en particular y “casi” de toda Canarias en general como observadores de primera fila, el espectáculo trae a escena y nos recuerda que lo que ayer era motivo de enfrentamiento, oposición, defensa del territorio, defensa de la soberanía, defensa de la defensa y de mas cosas, con ese argumento se aferraban a una bandera, con estrellas para unos, sin ellas para otros, al final unos y otros decían defender lo mismo, o mejor oponerse a lo mismo, lo que importaba era generalizar y hacer ver que eso del turismo era malo, atacando con cualquier argumento a quienes en ese momento apostaban por una industria que podía traer progreso a nuestra tierra, el turismo, …… Paradójico resulta ver ahora que los argumentos utilizados en ese momento, con mensajes catastrofistas, decían en sus “grandilocuentes” y vacíos discursos>-- ahora resultan ser prácticamente los mismo pero a favor de esta industria…… Habrán encontrado el acomodo (económico quizás) que no veían antes?
Algo ha ganado la industria del turismo en esta disputa, sus detractores ahora son sus mayores defensores… No les suena a comedía?
Desde luego a comedía suena, pero mientras esta obra esta siendo representada por los grandes actores que entre todos hemos elegido, la realidad de nuestra sociedad es que la gran mayoría sigue pasando apuros, haciendo su guerra personal de subsistencia, porque aunque haya riqueza, ya sea de una o de otra, a nuestros gobernantes les va a dar igual, mientras ellos tengan su “acomodo”. Y les da igual a base de que energía se trate, renovable o no…. Lo que si quieren renovar es su contrato de permanencia en las instituciones y por ello seguramente asistamos a actos mas esperpénticos y hasta hilaridad causaran en algunos de los espectadores mas alejados del escenario, pero de lo que si podemos estar seguros es que hasta que unos y otros no encuentren su acomodo (personal), la comedia habrá que mantenerla en escena.
Lo que si cabe preguntarnos es cuando nuestra sociedad pedirá que rindan cuentas los “Actores Principales” de esta tragicomedia, pues para ellos sigue siendo su juego y reto personal, pero mientras tanto a todos nos están convirtiendo en víctimas de sus delirios.
Como bien dice el refrán, “no hay mal que por bien no venga” en este caso para el turismo que tanto se demonizo, le ha llegado un momento de brillar, y ser bandera positiva, cuando era amenaza, ese esplendor ha venido de la mano de: otro demonio quizás? Y si es como el cuento del lobo ¿? A quien creer, será una amenaza, dejamos escapar ese “demonio”, con el turismo casi, pero no… Ustedes mismos con su sensatez y sabiduría que es mucha, tendrán una respuesta, compartámosla quizás entre todos podemos activar una luz en este oscuro túnel que tiene el camino por el que nos están llevado los actores.