La sargento Sánchez lleva años sufriendo mofas incluso delante de la tropa y recibiendo calificativos como "jodida enana", "minion", "gandula" o "lesbiana". Entre quienes supuestamente la vejaban también había una sargento, María F., quien dijo de ella que era «un hombre frustrado en cuerpo de mujer».
El diario El País se ha hecho eco de la información. Ahora, el Tribunal Supremo ordena investigar a los cinco sargentos y al capitán que desoyó a la víctima.
Según informa dicho rotativo nacional, la sargento Sánchez acudió a quejarse al capitán del acuartelamiento, sin ningún éxito. Alegó que no quería problemas personales en su cuartel. «No es un problema personal, ocurre delante de la tropa», le replicó ella. No hizo caso. Tras esto, Sánchez acudió a la justicia militar, pero el Tribunal Militar Territorial Quinto de Canarias decidió en 2018 dar carpetazo a la denuncia al entender que los hechos formaban parte de la rutina de los cuarteles.
El fiscal discrepó del archivo y presentó un recurso ante la Sala Quinta de lo Militar del Tribunal Supremo, que ahora investiga a los cuatro hombres y la mujer que participaron en el acoso.
En el sumario aparecen hechos que demuestran que el día a día de la sargento Sánchez era un sinvivir, como por ejemplo lo sucedido durante un ejercicio militar, donde Sánchez ordenó a una soldado que «no se olvidara de llevar el material para la limpieza de los fusiles de asalto”. Sin embargo, el sargento Ernesto A. L., que estaba allí, empezó a cuestionar públicamente su orden.
«No te metas en las órdenes que yo estoy dando», le comentó Sánchez. «Tú estás loca», le espetó Ernesto A. L., delante de varios soldados, al tiempo que «giraba su dedo índice de la mano derecha en su sien». Además, era habitual en el sargento Ernesto A. L., además, cuando estaba en la cantina, dirigirse o hablar sobre Sánchez con apelativos como «lesbiana y gandula».
